Es muy fácil darse cuenta cuando un mezcal se hace de forma tradicional para agasajar al paladar o sólo como un negocio más. Con el lanzamiento de Dos Hombres, el mezcal que siguió a Breaking Bad en los proyectos de los protagonistas, pusimos manos a a obra para conocer más a fondo la calidad verdadera de este espirituoso en una plática con Bryan Cranston.

Decidimos que el domingo era un buen día para ir a Fifty Mils a probar algunos de los nuevos tragos que pronto se podrán encontrar en su carta. 

Entrados en ‘la plática de barra’ llegamos a los destilados mexicanos; entonces salió a colación el nombre de un mezcal que en las últimas semanas ha provocado tanto revuelo como controversia: ‘Dos Hombres’.

Este proyecto surgió de la mente de los actores Bryan Cranston y Aaron Paul (sí, los protagonistas de Breaking Bad).

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Hace unas semanas, cuando leí la nota donde se anunciaba el lanzamiento de su marca de mezcal tuve sentimientos encontrados. 

Por un lado, como fan (muy fan) de la serie, me provocó curiosidad -morbo, para ser honesta-.

Por otro, como gozosa del mezcal y adoradora de mi país y sus tradiciones, algo de duda e incertidumbre respecto a la seriedad del proyecto y el respeto a uno de los destilados mexicanos más preciados que tenemos. 

No quise juzgar a la ligera y me puse a investigar. En este careo con el mezcal, logré confirmar lo que ya había leído y algunos datos más.

A poco más de diez años de que Breaking Bad se estrenara y con una amistad bien entrañada, Bryan y Aaron decidieron afianzarla con un proyecto en el que pudieran colaborar juntos, verdaderamente les apasionara y fuera significativo para ambos.

A estos Dos Hombres no les costó mucho decidirse por mezcal y fue entonces que comenzaron esta aventura.

Los tragos y la plática acerca de Dos Hombres en la barra de Fifty Mils continuaban; tuve la suerte de ser de las primeras personas no solo en tener la botella en las manos, sino en probarlo. 

En ese momento me di cuenta de que Bryan y Aaron no solo se aventuraron y dieron un salto al mundo de los destilados de agave -ese mundo tan nuestro- sino que lo hicieron con toda la seriedad y el respeto que el mezcal merece. 

Fue una grata sorpresa, me dio gusto. Quizá Fran, el bartender con más antigüedad de este bar lo notó y entonces nos preguntó si teníamos plan más tarde para volver porque habría una sorpresa.

Dos horas después, estábamos de vuelta

La sorpresa: ni más ni menos que Bryan Cranston en la barra de Fifty Mils, sirviendo mezcal Dos Hombres a unas 15 personas mientras platicaba con mucha emoción acerca los viajes que realizó a Oaxaca al lado de Aaron Paul.

Con mucha emoción explicaba a unos norteamericanos cuántos años le toma a un agave estar listo para elaborar mezcal; cómo debe beberse, cuáles considera que son las diferencias entre un tequila (Agave Azul) y un mezcal (Espadín, en este caso).

Mientras nos servía más mezcal, se tomó unos minutos para conversar con nosotros. Narraba emocionado lo mágico que le resultó el proceso para adentrarse en el saber de los agaves; la pasión y todo el trabajo detrás de este proyecto que recién ve la luz.

Nos platicó que recorrieron distintas comunidades de Oaxaca. En ellos conocieron variedades de agaves, vivieron de cerca el trabajo de los jimadores y los maestros mezcaleros; vivieron el proceso de elaboración, aprendieron a beberlo y sobre todo a valorarlo.

Los viajes en búsqueda del mejor mezcal

“Ir a Oaxaca ha sido una hermosa experiencia. En Estados Unidos negocios son negocios, en México no. Nuestro maestro nos insistió para que su esposa nos preparara el almuerzo, conociéramos a sus hijos y a la toda la gente del pueblo.

Los mexicanos te abren las puertas de su casa, te ofrecen lo que tienen, te hacen sentir parte de la familia. Todos se involucran y más que un trabajo, para ellos es una tradición familiar a la que le guardan gran respeto y realizan con verdadera pasión.

Eso nos enamoró aún más de ese lugar y nos hizo saber que ahí estaba lo que buscábamos.

Así fue como supimos que habíamos llegado con la familia indicada, con la que haría realidad el sueño de Aaron y mío. Estábamos en San Luis del Río, Oaxaca, una poblado de apenas 300 habitantes, en el que todos se dedican a producir su propio mezcal”.

¿Por qué decidirse por un mezcal? 

Bryan, contestó con una sonrisa en el rostro “buscábamos algo verdaderamente especial, algo que nos llenara de emoción y nos apasionara.

A estas alturas no necesito buscar un ‘trabajo’, ya trabajé mucho tiempo. Ahora cualquier cosa que decido hacer la hago por amor, por llenarme de gozo y eso es lo que el mezcal nos provoca”.

Bryan Cranston

Nos contó -lo que creo que de este lado de la frontera tenemos bien sabido- que en Estados Unidos quienes desean beber un destilado mexicano piden tequila porque en realidad no conocen ningún otro.

Por esto, luego de probar distintos agaves llegaron a la conclusión de que la mejor manera de introducirlos al mundo del mezcal era eligiendo la variedad más amigable al paladar. Un Espadín con notas frutales, un ligero ahumado, muy buen cuerpo y 42º, eso es Dos Hombres.

Otra pregunta que no nos podíamos guardar ¿por qué en las botellas solo aparece el nombre de Bryan y Aaron y no el del Maestro mezcalero?

“Nosotros queríamos incluir el nombre del Maestro en la botella, pero él fue quien nos pidió que no lo hiciéramos. Respetamos su deseo y por ello no aparece”, nos dijo Cranston.

El trabajo de las personas involucradas en la elaboración de este mezcal es valorado y por lo tanto pagado a un precio justo. Al día de hoy es fuente de ingresos para una familia y esperan que pronto lo sea para más. 

El retrogusto

He de ser honesta, me llevé una grata sorpresa. Me encontré con un producto bien hecho, con dos hombres respetuosos de nuestras tradiciones y enamorados de México.

También se agradece la sencillez y buena vibra de Bryan Cranston, quien llegó a la barra de Fifty Mils para servir tragos por cuarenta y cinco minutos y se quedó más de dos horas, tomándose el tiempo para platicar acerca de este proyecto y compartir su alegría como si fuéramos viejos conocidos con quienes tuvimos la suerte de estar ahí.

El Mezcal Dos Hombres se podrá adquirir y degustar en el bar Fifty Mils del Hotel Four Seasons en Ciudad de México o en línea en www.doshombres.com

Twitter e instagram: @paolanorman