¿Has notado que en los últimos años hay más ofertas de espacios gastronómicos conocidos como mercados gourmet?
Te platicamos el origen de estos proyectos y te presentamos al papá de todos: el Mercado de San Miguel en Madrid.
Los restaurantes gastronómicos tienen 220 años, todo lo relacionado a un servicio de comida y hospitalidad era sólo en la corte y en los palacios. Nuestro sector es jovensísimo.
Ferrán Adrià en MadridFusión 2019.
Si quieres conocer a una ciudad ve a su mercado porque éste es su corazón, dice el dicho.
Hoy, la industria de alimentos y bebidas representa $799 billones de dólares sólo en Estados Unidos, de acuerdo al chef Anthony Myint.
En Madrid hay 46 mercados, 23 restaurantes de estrellas Michelín y más de 30,000 locales gastronómicos, según el diario El Mundo. El más emblemático, el Mercado de San Miguel.
En Europa y Latinoamérica la afición por los mercados callejeros es el pan de cada día; en Estados Unidos, donde abundan los centros comerciales, es un jugador esencial en la popularización de los food halls.
Este modelo surge como respuesta a la necesidad de conglomerar en un mismo espacio una oferta práctica de comida; se trata de dignificar la experiencia gastronómica como una contrapropuesta a los food courts comerciales.
En el sótano del Hotel Plaza en Nueva York, Todd English desde el año 2010 diseñó un destino gourmet de restaurantes mixtos inspirados en la cultura mediterránea.
Desayunos, snacks para llevar, comida de trabajo, sobremesa y tiendas con un diseño estilizado; un lugar ya icónico de la ciudad.
Sucede lo mismo con la marca Eataly, que vende y promueve el sueño italiano en una experiencia explicativa y sensorial de las regiones de Italia.
Eataly nació en Turín en el año 2007 y hoy tiene presencia en Chicago, Nueva York, Boston, Los Ángeles, Las Vegas, Florencia, Roma, Moscú, Japón y Estocolmo.
Eataly mezcla restaurantes de las distintas regiones italianas y sus especialidades: pizza, vino, pastas, café, aceites, pescados y postres.
Asimismo, el pionero Mercado de San Miguel de Madrid realza la fórmula de todo en un mismo lugar. Hoy es la parada obligada de cualquier turista que busque un primer acercamiento gastrocultural de España.
Madrid, 1916. Se inaugura el Mercado de San Miguel como una central de abastos para surtir a la ciudad de insumos cotidianos a sólo unos metros de la Plaza Mayor en Madrid.
Con su estructura de hierro icónica hace reminiscencia a la arquitectura parisina de principios de siglo por el arquitecto Alfonso Dubé Diez.
Durante los cien años anteriores fue una plaza pública abierta al intercambio comercial que nació como respuesta a la demolición ordenada por José Bonaparte en 1809.
Madrid, 2009. El mercado evoluciona para convertirse en el primer food hall de la ciudad: un punto de reunión social que sintetiza las distintas gastronomías españolas en un mismo recinto manteniendo la estructura original con 1200 metros cuadrados.
Es hasta el año 2018 que consolida su oferta culinaria y se invitan a chefs reconocidos como Jordi Roca del Celler de Can Roca con sus helados gourmet Rocambolesc o a Roberto Ruíz con Tacos, Margaritas y Punto, versión quick service de Punto MX, primer restaurante mexicano ganador de una estrella Michelín en Europa.
De los puestos originales solo queda una frutería y los mariscos Morris. A raíz del cambio de enfoque, el Mercado de San Miguel es el más turístico de la ciudad y recibe en promedio a 200,000 personas al día, según el diario El País.
Estrella Michelin y alta cocina son términos que suenan a restaurante impagable.
En esta década se ha acentuado la oferta por parte de chefs reconocidos en ofrecer restaurantes casuales a precios accesibles. En México, Mónica Patiño tiene Delirio; Enrique Olvera, Eno y el Molino del Pujol;Elena Reygadas, Café Nin y sus panaderías.
En el Mercado de San Miguel se reúnen personajes como Rodrigo de la Calle y Ricardo Sanz, dos cocineros con estrellas Michelin.
Ambos tienen locales en el mercado con cheques promedio de máximo 20 euros.
¿Qué quiere decir esto como fenómeno? Democratizar el arte culinario, acercarlo al público y generar afluencia para sumar esfuerzos entre varios jugadores y hacer de un espacio un destino compartido.
El Mercado de San Miguel es un museo: un recorrido express por los distintos tintes culinarios de España.
Hoy hay más de 20 locales, entre los cuales se venden tapas de un euro, boquerones, aceitunas, cocidos, quesos añejados de Asturias, jamón ibérico, mariscos de Galicia, paella y arroces, croquetas…
Para beber corre el vino de la todas las denominaciones de origen, gin & tonics, vermouth y cerveza local.
El mercado abre de 10AM y cierra a media noche. Se escuchan idiomas mixtos en cada rincón: inglés, francés, italiano.
El ambiente festivo gachupín está presente en las mesas a lo largo del lugar y por cañas no paramos.
Si estás en Madrid, además de ir al Prado, te recomendamos bajar la aplicación Mercamad en tu celular: ¡es la guía de los 46 mercados en esta ciudad en sus distintos barrios!
*Nuestro mero mole es hacer restaurantes y food halls a nivel global que generen experiencias extraordinarias para sus consumidores y sus inversionistas.