Uno de los principales focos de bacterias de nuestra cocina son los trapos que usamos para limpiar, secar la vajilla, secarnos las manos, etc. Uno de los indicadores inmediatos de que debemos limpiar o sustituir los trapos de cocina es el mal olor y esto pasa más a menudo de lo que nos gustaría.
Además de limpiar con ellos varias superficies, habitualmente se mantienen húmedos y esto contribuye a la proliferación de todos estos indeseables microorganismos. Según un estudio realizado por el Departamento de Ciencias de la Salud de la Universidad de Mauricio, los trapos de cocina son un criadero de bacterias.
¿Por qué los trapos de la cocina “se apestan” tan rápido? Esto es lo que sucede:
Los trapos son básicos en la cocina, porque la limpieza no puede faltar en el lugar donde preparamos nuestros alimentos; sin embargo, al usarlos es normal que absorban la suciedad, no se sequen bien (por eso huelen a humedad) y con el uso constante acumulen malos olores a pesar de que los lavemos al terminar de usarlos.
La verdad es que es realmente molesto tener trapos con malos olores, pero ¿cómo eliminarlos?
Remedio casero: ¿Cómo quitarle el mal olor a los trapos de cocina?
Antes de compartirte el remedio casero queremos aconsejarte algo para reducir el riesgo de pasar bacterias entre la cocina y otros lugares de la casa.
Lo más recomendable es tener uno o dos trapos para limpiar la estufa, otro para usar como base debajo de las tablas de picar que se usan para que no se resbalen y uno más para secar los trastes lavados.
De esta manera evitarás contaminar algunas superficies con las bacterias de la estufa, que es donde se acumula más suciedad debido a la grasa y el polvo que atrae.
Una vez que termines de usarlos, recuerda enjuagarlos con agua y jabón de trastes líquido. Si te es posible, tállalos en un lavadero, enjuaga bien, exprime y déjalos extendidos donde les dé aire y/o sol para eliminar las bacterias. Aún así, es importante poner en práctica este remedio cuando huelen mal y verás qué efectivo resulta.
Esto es lo que tienes que hacer para quitar el mal olor a los trapos
Sólo tienes que poner un recipiente donde quepa tu trapo o tus trapos (si son varios asegúrate de que tengan espacio), espolvorea bastante bicarbonato de sodio sobre los trapos y luego vinagre blanco, notarás que tiene una reacción, luego añade agua caliente, si te es posible hirviendo hasta cubrir la superficie.
Deja reposando por una noche, o por al menos un par de horas, ya que se haya enfriado el agua puedes enjuagar con agua limpia y dejar tus trapos a secar extendidos, verás que los malos olores se han esfumado.
Puedes agregarles unas cuantas gotitas de aceite esencial de limón
Los aceites esenciales, como el aceite esencial de limón, son conocidos por sus propiedades antibacterianas y su fragancia fresca. Agregar unas gotas de aceite esencial de limón a tus trapos de cocina después de lavarlos y antes de secarlos puede ayudar a neutralizar los olores y dejar un agradable aroma cítrico. Además, los aceites esenciales pueden ayudar a prevenir el crecimiento de bacterias que causan malos olores.
Es bien importante que los laves con regularidad
Una de las mejores maneras de prevenir y eliminar el olor a humedad en los trapos de cocina es mantenerlos limpios y secos, esto comienza con el lavado regular. Si utilizan trapos con frecuencia, debe lavarlos al menos una vez a la semana, lo cual evitará que los restos de alimentos y la humedad se acumulen, lo que puede causar malos olores.
Una de las mejores maneras de prevenir y eliminar el olor a humedad en los trapos de cocina es mantenerlos limpios y secos.
Cuando los laves, asegúrate de utilizar agua caliente y un detergente de buena calidad. El agua caliente es efectiva para eliminar la grasa y los aceites que pueden contribuir al mal olor. Si es posible, agregue un poco de vinagre blanco al ciclo de enjuague, pues este producto actúa como desinfectante y ayudará a eliminar cualquier bacteria que contribuya al olor desagradable.
Secado completo y rápido
La humedad es una de las principales causas del mal olor en los trapos de cocina. Por lo tanto, es fundamental asegurarse de que estén completamente secos antes de guardarlos. Después de lavar los trapos, cuélguelos en un lugar bien ventilado para que se sequen rápidamente; evite dejarlos en una pila húmeda o en lugares
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