Hoy, pensar en un negocio que no tiene herramientas tecnológicas para eficientar sus procesos es sinónimo de ser obsoleto e incluso incompetente. En el mundo de los restaurantes, la tecnología tiene cada vez más cabida, principalmente en la sala. Actualmente se puede hablar incluso de inteligencia artificial y equipos que automatizan las cocinas.
Muchas empresas están poniendo atención en crear productos para hacer más eficientes los procesos en restaurantes y operadores de servicios, como se expuso en el foro “El futuro de los restaurantes”, llevado a cabo en Hotel Casa Awolly el día 5 de noviembre. La intención de estos productos, según los ponentes, es mejorar la experiencia de los comensales y que, además, perciban estos cambios de una manera positiva.
“Es importante hablar del desarrollo tecnológico en alimentos y bebidas, sin embargo, tengamos claro que lo más importante son las personas que operarán esas herramientas.” Hammid Bana, profesor de sistemas de información y ponente de la Universidad Anáhuac en el congreso “El Futuro de los Restaurantes”.
El desarrollo tecnológico está llegando a todos lados, incluso a nuestra alimentación. Aquí te presentamos algunos ejemplos de cómo la tecnología cambiará la percepción de la atención en un restaurante y cuáles son las líneas de acción para mantener la calidad en el servicio.
Aunque ya existen plataformas como OpenTable, la intención es que, por medio de big data, estas aplicaciones tengan información extra -más específica- del cliente. La idea es satisfacer necesidades que el comensal no sabe que tiene por medio de lo que se sabe de él. Algunos ejemplos son el tipo de bebidas que se ofrecerán, alergias, alimentos que no nos gustan o preferencias respecto a la ubicación de nuestra mesa.
Por medio de tabletas, los menús podrán mostrar la presentación de los platillos, ingredientes, el tiempo que tomará llegar a tu mesa y su elaboración. También, para los amantes del vino, este software dará las opciones para maridar con las que cuenta el restaurante. De esta forma no será necesaria la ayuda de un sommelier o un mesero presencial. Además, con la ayuda de lentes 3D, podrás ver el montaje del plato en tercera dimensión.
Hoy en día pagar con tarjeta de crédito o débito para evitar llevar efectivo es normal, pero todo indica que existirán softwares para hacer cobros por medio de reconocimientos faciales. Esto será posible gracias a los blockchains o cadenas de bloque, que son una estructura de datos en los que la información se agrupa en conjuntos que pueden ser relacionados con otros bloques de otras cadenas. Es decir, todo estará conectado.
Olvídate de la típica libretita donde los meseros apuntan todo y muchas veces se confunden por quién pidió qué. Estas tabletas hacen la comanda y la envían directo a la cocina sin la necesidad de desplazarse. Además, este aparato tiene la capacidad de agrupar en conjuntos bebida y alimentos de cada comensal para evitar confusiones. La intención es que el mesero pueda ahorrar ese tiempo para platicar e interactuar con el cliente. También resulta muy útil cuando se pagan cuentas separadas, pues el sistema identifica cada orden como una unidad.
Hoy en día muchos restaurantes de alta gama en el mundo cuentan con un área específica de investigación, desarrollo e innovación. Este departamento, mejor conocido como I+D+i , está conformado por cocineros, científicos y administradores del propio restaurante, y tiene la función de crear procesos que faciliten la eficiencia y saquen el mayor provecho posible a los alimentos. Estos equipos buscan dar un factor diferenciador en la calidad gastronómica de los restaurantes. Dentro de las funciones también está capacitar al equipo de servicio para mejorar la experiencia del comensal.
Por medio de un software podrán crearse recetas con sobrantes de comida para que se desperdicie lo menos posible. Además, las porciones de los platillos podrán adecuarse al tipo de cliente y sus hábitos alimenticios. El concepto de restaurantes de rendimiento personalizará los platillos sistemáticamente velando por la salud y el bienestar sin desperdiciar.