No hay nada más frustrante que pensar que tienes todo para preparar una ensalada y encontrarte con pepinos aguados y mohosos porque no sabes cómo conservar tal cosa. Aprende a guardarlos para que se mantengan frescos y crujientes por mucho más tiempo.
Ya sea que compres tus pepinos frescos, de los pequeñitos que vienen en bolsa o que los coseches de tu jardín, enjuágalos. Mientras lo haces, fíjate si tienen manchas blandas o mohosas. En ese caso, corta el lado malo y come el restante ese mismo día. Una vez bien limpios, están listos para almacenarse.
El exceso de agua en la superficie fomenta que los pepinos se echen a perder. Una vez que estén secos, envuélvelos en un paño de cocina limpio, una toalla de papel o guárdalos en una bolsa de papel de estraza.
Esto ayudará a mantener a raya la condensación o la humedad cuando los almacenes, lo que ayuda a prevenir la humedad, el moho y el deterioro general.
Esto funciona también para las verduras de hoja verde, las hierbas y cualquier verdura tierna que quieras proteger en tu refrigerador.
Toma los pepinos secos y envueltos y mételos dentro de una bolsa de plástico. No necesitas una bolsa de plástico con cierre: un poco de flujo de aire es algo bueno, ya que ayuda a evitar que se acumule condensación alrededor de los pepinos. Si todo lo que tienes es una bolsa de plástico con cierre, mantenla abierta por la parte superior.
Almacenar tus pepinos en plástico también ayuda a protegerlos del gas etileno producido por frutas como los melones que podrías tener en tu refrigerador.
Los pepinos son especialmente sensibles a la maduración excesiva y a la descomposición cuando se exponen a este gas, así que consulta esta lista de frutas y verduras que lo liberan y trata de mantenerlas separadas de tus pepinos.
Pon la bolsa en la parte menos fría del refrigerador, el cajón para verduras. Cuida de que haya suficiente espacio entre verduras, guardar todo muy junto también contribuye a su descomposición.
Lo más común es que sólo usemos una fracción de pepino y volvamos a guardar el resto. Para preservar lo que queda, sólo tienes que cubrir el extremo expuesto con un poco de envoltura de plástico. Después regrésalo a su envoltorio original.
Así de fácil es conservar tus pepinos crujientes por más tiempo. Y si quieres más tips para guardar otras frutas y verduras para que te duren más, pasa por aquí.