El chef español José Andrés llegó a la frontera de Ucrania y Polonia para repartir alimentos a personas desplazadas de su país por la invasión rusa de los últimos días.
Originario de Asturias, el cocinero siempre ha mostrado una inquietud particular por temas humanitarios y, a pesar de que ha pasado la mayor parte de su vida dentro de cocinas en Estados Unidos, ha sido reconocido numerosas veces por el impacto social que tiene su proyecto.
A ayudar en la frontera de Ucrania: el chef José Andrés
Hace dos semanas, él, junto con su organización World Central Kitchen llegó a las fronteras de Ucrania. ¿El objetivo? Trabajar 24 horas al día en servir comida caliente y nutritiva a quienes intentan huir de los ataques dentro de Ucrania. Adicional a esto, el equipo del chef José Andrés apoya a restaurantes locales preparando comida en ocho diferentes ciudades ucranianas.
Después de cruzar a Polonia, los refugiados ucranianos son transportados por un autobús a lugares donde reciben atención médica, alimentación y cobijo. En estos centros, World Central Kitchen también tiene injerencia: se establecieron food trucks que alimentan a miles de personas diarias.
Sus orígenes
Arrancó como todos: en la cocina de un restaurante que lo vio crecer hasta convertirse en todo un empresario que ahora posee un emporio; 31 establecimientos en España y Estados Unidos. Sin embargo, su historia de migración lo hizo crear conciencia de la comunidad vulnerable que pasa días complicados en búsqueda de una vida mejor.
Así, en 2010 fundó World Central Kitchen, una ONG que provee soluciones inteligentes para acabar con el hambre y la pobreza, usando el poder de la comida para reanimar comunidades y fortalecer economías. A través de esta plataforma, ha servido comida a millones de personas que pasan situaciones complicadas. Un ejemplo de ello es el apoyo a más de tres millones de personas con alimento después del Huracán María en Puerto Rico.
A José Andrés le gusta contar historias con lo que cocina y transformar a sus comensales en personajes de esas historias. Gracias a esto, también ha movilizado a su organización World Central Kitchen para ayudar a alimentar a las personas que trabajan en emergencias, empleados de saneamiento y familias necesitadas en todo el país durante toda la crisis sanitaria ocasionada por COVID-19.
José Ramón Andrés Puerta forma parte de la lista de las 100 personas más influyentes según la revista Time y estuvo nominado al premio Nóbel de la Paz en 2019. Su último reconocimiento fue el Basque Culinary World Prize en 2020; una beca de 100 mil euros que donó a sus múltiples proyectos de filantropía y cambio social mediante la gastronomía.
