Traemos el sentimiento a flor de piel desde que se anunció que ya viene el documental sobre la vida de Anthony Bourdain. Por eso, decidimos releer su libro Confesiones de un Chef, donde en uno de sus capítulos nos platica cómo cocinar como uno estando en casa.
Entre sus tips hay ingredientes, utensilios y cosas que siempre hay que tener a la mano. Los detalles son importantes así que también pon atención a ellos.
Lo primero que necesitas según Tony -y cualquier persona que haya experimentado picar con velocidad- es un buen cuchillo de chef. No te dejes engañar por las apariencias: entre más filo, será menos peligroso así que también date a la tarea de darle el mantenimiento correspondiente.
No importa tanto si vale los millones o lo encuentras en una tienda departamental, el chiste es que te sientas cómodo de usarlo y practiques seguido con él. Hay miles de marcas, los más famosos son alemanes aunque también hay muy buenas opciones japonesas y americanas. Todo depende de tu presupuesto.
¿Te preguntas cómo es que los restaurantes dibujan sobre los platos con las salsas? La respuesta es: con una mamila de plástico de esas que se utilizan comúnmente para servir cátsup o mayonesa en los negocios de hamburguesas. Las encuentras tanto en tiendas departamentales y de especialidad como en mercados.
Si definitivamente no tienes tiempo ni paciencia para practicar esos cortes perfectos que requieren algunas salsas o preparaciones específicas, te recomendamos hacerte de una mandolina. Este utensilio sirve para sacar rebanadas muy finas de cualquier cosa; a partir de eso es más sencillo sacar las codiciadas macedonias o brunoise de los grandes chefs.
Si ya vives solo sabrás que las cacerolas y los sartenes no son un gasto barato. Inviérteles, son cosas que duran para siempre si sabes cuidarlas. Aquí te damos unos tips sobre los materiales que puedes elegir.
Según Bourdain, no importa qué es lo que te den en un restaurante, siempre estarás comiendo mantequilla así que te recomendamos siempre tener en casa para cocinar como todo un chef. Este ingrediente es lo primero y último que se agrega en una preparación para hacerla deliciosa.
Úsala para dorar carne y caramelizar vegetales, también para dar brillo y consistencia a las salsas. Es la base de la repostería y también el elemento que une los sabores de todo un plato.
Pocos ingredientes pueden tener sabores tan distintos como el ajo y utilizarlo correctamente es un éxito asegurado. Una buena opción es tenerlo rostizado para disminuir la horrible sensación de repetir.
El perejil picado en chiffonade no solo es un elemento decorativo en los platos de los grandes chefs sino un secreto de sabor a la hora de cocinar. Lo mejor será picarlo a cuchillo y a su mínima expresión para que no sea invasivo y más bien complemente los sabores.
Para salsas, caldos o terminar preparaciones siempre hay que tener un buen fondo de cocción. Esto se realiza con los huesos de algunos animales como el pollo, ternera o pescado, de acuerdo a los sabores que quieras alcanzar. Toma tiempo que quede listo pero vale completamente la pena.
Una forma de llevar los fondos a un siguiente nivel es hacer una demi-glace, es decir, mezclarlos y agregar algo de vino tinto, echalotes o cebolla picada, tomillo y hojitas de laurel. Calienta a fuego muy bajito y deja que reduzca, en minutos tendrás una salsa ganadorsísima para carnes o vegetales.
¿Quién dijo que la apariencia es secundaria en una experiencia gastronómica? Lo bonito siempre se agradece así que ten a la mano hojitas de menta, albahaca, perejil o cebollín para darle ese toque final.