Por más saludables que sean nuestros hábitos alimenticios, nadie que ame lo dulce perdona los postres. Estamos acostumbrados a pensar que cada bocado es un pecado grave y no hay nada más lejano de la realidad cuando podemos usar otros ingredientes además de los comunes.
La crema batida no tiene por qué ser una constante, ni la harina blanca el insumo de cabecera. El mundo está lleno de opciones que Larousse Cocina quiere enseñarte para que disfrutes sin culpa.
Aunque aquí te tenemos algunos tips, la información completa está en el libro Postres Gourmet vs. Light, el cual trae más de 35 recetas formuladas por el chef Valentín Neraudau con versiones originales y saludables, para que tengas ambas.
Fit & fat: cuando los postres sí son saludables
Hay formas de reducir el contenido calórico de lo que comes, solo es cuestión de conocer la materia prima y saber cómo utilizarla. La primera recomendación siempre va a ser dar prioridad a lo que sea más natural y menos refinado, así reduces energía vacía que puede causarte problemas de salud.
Sustituye frutas en almíbar por frescas o asadas
Si las vas a utilizar para decorar tartas o quizás agregar en un pastel, te recomendamos que te ahorres el azúcar con la que se cocinan las frutas, así aprovechas la textura real y los sabores originales de cada ingrediente.
También existe la opción de sellarlas en una plancha caliente, así los sabores se concentran y también pueden funcionar como elementos decorativos de contraste.
Azúcar refinada contra stevia o jarabes
Guarda el azúcar blanca para cuando necesites hacer caramelos o decoraciones muy finas. Cuando sea solo un ingrediente más, puedes sustituirla por stevia contemplando que cada cucharada endulza el triple.
Aprovecha también la miel de abeja y el jarabe de maple o agave. Aunque darán un toque de sabor distinto, esto puede ser una ventaja para tu receta. Te recomendamos la primera cuando haya frutas, la segunda cuando integre frutos secos y la tercera cuando quieras que tu postre no sea tan empalagante.
No solo de trigo se hacen bizcochos
La tarta Santiago, por ejemplo, se elabora solo con harina de almendra. Foto: Facebook
Aprovecha las harinas de frutos secos como la avellana, almendra y nuez. En muchas recetas también funciona el coco pulverizado y la avena así que no te detengas por opciones pero eso sí, te recomendamos que utilices un poco más de bicarbonato o polvo de hornear para que queden tan esponjosos como te los imaginas.
Aceite de coco vs. mantequilla
Lo sabemos, nada como el maravilloso sabor y aroma que aporta la mantequilla a los postres… La buena noticia es que sí hay formas de sustituirla para tener postres ricos y a la vez más saludables.
Nos encanta el aceite de coco cuando lo combinamos con ingredientes como piña, mango o frutas muy ácidas ya que se equilibra y da un toque de profundidad y textura maravillosos.
Los merengues también quedan ¿¡con agua de garbanzo?!
¡Sí! Cuando pongas a remojar esta legumbre guarda el líquido que sobra porque tiene algunos almidones que perdió al hidratarse.
Agrega un poco de azúcar y bátela como si fueras a hacer un merengue normal. Te sorprenderá que la textura es muy similar y el sabor es bueno.
Valora la necesidad de la Chantilly
En algunos postres la crema batida es básica pero no siempre es el caso, menos aún cuando estamos hablando de opciones saludables.
Si es para decorar mejor ahórratela; en caso de que la intención sea dar una textura cremosa se nos ocurre que puedes sutituirla por yogurt griego endulzado con miel de abeja.
