El atún fresco es considerado uno de los alimentos más ricos en proteínas y grasas buenas. Proviene de la familia de los túnidos (thunnus) y aunque los más conocidos son el de aleta azul y amarilla, existen más de 15 variedades en el mundo.
Es una proteína de sabores fuertes y composición biológica compleja, su uso en la gastronomía es bastante versátil y muy codiciado cuando es de calidad.
Forma parte importante dentro de la gastronomía de Japón aunque también es un ingrediente muy valorado en la industria pesquera mexicana.
Es considerado un pescado azul gracias a la cantidad de grasas buenas que posee. Se dice que fue el primer atún en enlatarse; puede comerse crudo o preparado. Su carne suele ser muy ligera y tiene un sabor suave.
Esta variedad es excelente para cocinarse cocida como en un atún a la mexicana.
Es uno de los más valorados debido a que se encuentra en peligro de extinción, se distingue por su carne color rojo. Esta es una especie del Pacífico Norte Oriental, migra a la Península de Baja California.
Se captura también en en el Mediterráneo y es exportado principalmente a Japón. Su uso en la gastronomía es demasiado valorado por su intenso sabor y textura untuosa.
Esta variedad es excelente para servirse cruda en sashimis, tiraditos o tártaras.
Es un tipo de especie que se caza sobre todo en Estados Unidos, México y Japón. Se le dice atún de aleta amarilla debido a la pigmentación que tiene en las bandas y aletas dorsales y en la anal.
Este atún es uno de los más consumidos alrededor del mundo y se distingue por su sabor y carne suave.
Esta variedad es excelente para cocinarse sellado con una costra de algún fruto seco o chile.
Es considerado un alimento cardiosaludable gracias a que es rico en ácidos y grasas buenas los cuales ayudan a reducir los altos niveles de triglicéridos.
Tiene un alto contenido en vitaminas como la A, B, B2, B3, B6, B12, perfectas para ayudar y conservar la piel.
Además aporta minerales como el fósforo, hierro, magnesio y yodo, los cuales son fundamentales para el buen funcionamiento del intestino y sistema inmune.
Los ojos deben tener las pupilas brillantes estar saltones y con la córnea transparente. Si estos se encuentran turbios y poco lúcidos querrá decir que no es un pescado fresco.
La piel debe estar firme, suave y limpia. Checa que las branquias tengan un rojo brillante y que las escamas estén pegadas a la piel.
El olor es otro de los aspectos importantes a la hora de elegir un atún fresco, es importante que huela a mar y a sal. De tener un hedor fuerte es señal de que está pasado.
Te enseñamos a limpiar pescado desde cero.
El atún es tan versátil que se puede comer crudo o cocido. Aquí te dejamos dos recetas ganadoras.
Para la salsa teriyaki
Para la salsa
Ingredientes