La cocina japonesa va mucho más allá de los rollos de sushi que conocemos y para demostrarlo como se merece, llegó a la Ciudad de México Ryoshi. Esta palabra significa cazador y desde hoy están listos para recibirte con todo su abanico de sabores.
Esta barra abrió sus puertas en San Pedro Garza García en Monterrey y gracias a su buen recibimiento llega a la CDMX en una de las avenidas más concurridas de Polanco.
El menú es amplio y con gran variedad de platillos e ingredientes para elegir. Como toda la gastronomía japonesa, cada plato tiene su manera especial de comer, así que no te sorprendas si te sugieren tomar directo con tu mano algún ingrediente. Tú solo déjate llevar.
Para comenzar esta travesía por Ryoshi hay dos tipos de entradas, las calientes y las frías. La decisión depende de tu antojo pero de una vez te decimos que ambas son una delicia.
Entre las calientes están los tradicionales edamames que no pueden faltar en distintas presentaciones.
Si estás más explorador puedes pedir las láminas de wagyu en piedra caliente y recomendamos que te vayas acostumbrando a esta carne porque a pesar de ser bastante exclusiva (y costosa) en Ryoshi la tienen directo de Japón.
Para las opciones frías te recomendamos una en especial, el truffle sashimi que son láminas de atún, salmón y kampachi con láminas de trufa negra y caviar. Sí, el fine dining en su máxima expresión.
Uno de los ingredientes consentidos de la cocina japonesa es el cangrejo de caparazón suave y aquí lo cocinan de una forma magistral, este es uno de los platillos orientales que puedes comer con la mano.
¿Quieres una oferta vegetariana? No te preocupes porque para eso está Bonzai: brócolis con soya dulce que juntos hacen en boca ese sabor acidito y picante tan emblemático de la cocina japonesa.
Para ponerle aún más emoción a esta experiencia culinaria que te espera en Ryoshi están las brochetas de pork belly o el rib eye con salsa de shitake, toda la carne aquí está especialmente cocinada para ser suave y jugosa.
Los postres de Ryoshi son una agradable sorpresa para quienes gustan de lo dulce o esperan este tiempo para apapachar. Todos son grandes así que son perfectos para compartir con tu acompañante.
Si estás de festejo el rainbow cake es perfecto y colorido para la ocasión; el pan es suave y esponjoso y lo sirven con nieve de fresa.
Para quienes se acaban uno completo está la terrina de coco que simplemente te deja sin aliento, este postre se coloca sin duda entre los favoritos.
El coco rallado y la salsa dulce vertida sobre el brioche merecen acompañarse de un buen café.
Y no olvidemos las bebidas. Como buen restaurante japonés, Ryoshi tiene una gran oferta de destilados orientales que puedes tomar como aperitivo. Su mixología también destaca y si estás en plan divertido el sakura sin duda te encantará, tiene gin, aperol, frutos rojos y cítricos.
Si quieres llevar tu cena al siguiente nivel, Ryoshi es el lugar ideal; por fuera apenas se alcanzan a ver las risas de los comensales al ser discreto y cuando entras un ambiente cálido e íntimo te abraza por sus luces tenues.
Tiene un espacio bastante amplio con capacidad de hasta 200 personas que ni siquiera notarás porque sus platillos te mantienen atento a las sorpresas culinarias. Tú eliges el espacio, puedes estar en la barra de sushi o cerca de donde los mixólogos están haciendo maravillas con los licores.
Disfruta más tu visita con platillos al centro y listos para compartir.
Dirección: Av. Presidente Masaryk 111, Polanco.
Facebook: @ryoshimasaryk
Instagram: @ryoshimasaryk