Si el viaje a Puebla resulta largo o complicado (aunque hay que agendarlo para cuando se pueda), uno puede probar y comerse a Puebla en este restaurante. Una de las mejores representaciones de la cocina poblana, esa cocina colonial, monástica y elaborada de la cual nacieron platillos tan fantásticos como el mole o los chiles en nogada es, en la ciudad de México, Casa Merlos.
Iniciaron hace 40 años en la antigua casa familiar, en un patio central con las sillas y mesas puestas de manera muy informal, y hoy es un restaurante hecho y derecho, igualmente informal, que sólo abre durante la comida.
En este lugar la sazón familiar de la señora Lucila Molina de Merlos y su cocina poblana del siglo XVIII es muy palpable. Se nota a cada bocado, las recetas vienen de generación en generación y se han esmerado por conservar ese toque casero que ha hecho que muchas familias regresen, regresen y regresen.
Casa Merlos reúne a entusiastas y familias buscado verdaderas joyas de la cocina poblana. El sitio es pequeño pero las sillas de palo y el pequeño patio invitan a comenzar, de entrada, con unas chalupitas fritas en manteca de cerdo, las clásicas e irrepetibles garnachas poblanas, que son un sueño. Para continuar, uno de los mejores pollos con mole de la ciudad, con ese particular sabor dulce y poco picante de la receta poblana, y presentado mucho ajonjolí.
Sabemos que es difícil guardar un huequito en el estómago ante tanta delicia, pero de postre bien vale la pena pedir la natilla con pedacitos de piñón.
Si de beber se trata, no dejes de probar el tequila de la casa que es elaborado especialmente para el restaurante.
Casa Merlos
Victoriano Zepeda 80, colonia Observatorio, México DF.
Teléfonos: 5277 4360 // 5516 4017
Sitio web: www.casamerlos.com