Después de comer siempre nos quedamos con un huequito para algo dulce. Aunque tenemos muchos dulces e ingredientes para esto, te queremos dar un recorrido por 12 postres emblemáticos de México.
Muchos de ellos tienen influencia española, pues las recetas viajaron con la Conquista. Otros más se crearon aquí con el mestizaje de ingredientes y dan identidad a ciertas regiones.
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Arroz con leche
Aunque tiene origen español, el arroz con leche es un postre clásico que sirven las abuelas o las fondas después de una buena comida mexicana.
Esta delicia es arroz cocido en leche con azúcar, canela y pasas y se come en gran parte del territorio mexicano, desde la ciudad de México y Guanajuato, hasta Jalisco, Oaxaca, Tabasco y Chiapas.
Prepara arroz con leche con esta receta.
Capirotada
Este postre se elabora de maneras diferentes en diversos estados de la República, pero la idea general es bañar pan rebanado y horneado con una miel de piloncillo y espolvorearlo con cacahuates, almendras, pasas y queso rallado.
Hay estados cuya miel de piloncillo ¡también lleva jitomate y cebolla!
La capirotada en distintas versiones se come en Baja California Sur, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Colima, Durango, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, San Luis Potosí, Veracruz y Zacatecas.
Aquí tenemos la receta de capirotada de una abuelita jalisciense.
Y acá la receta de capirotada como se hace en Chihuahua.
Jericallas
Este postre ha llenado de sabor las casas tapatías desde sus primeras versiones en el siglo XVIII hasta nuestros días.
Al igual que muchos productos tradicionales, su origen es incierto. Sin embargo, debido a su parecido a la natilla europea se cree que surgió en Jérica, España.
Como resultado del mestizaje culinario entre el nuevo y el viejo mundo, la jericalla mezcla ingredientes mexicanos y europeos como leche, canela, azúcar, huevo y vainilla.
Luego de mezclar, batir y hornear los ingredientes se obtiene una golosina que recuerda en sabor al flan, pero con una sensación muy ligera en la boca.
Aquí encuentras la historia completa y la receta de la jericalla.
Marquesitas
La historia cuenta que en 1945 surgió uno de los postres callejeros consentidos de todo el sureste mexicano.
Esta maravilla está elaborada con masa dulce de barquillo de helado y se rellena con queso holandés rallado. ¡El contraste de sabores es lo que encanta a todos!
Actualmente también se puede rellenar con crema de avellanas, mermeladas o cualquier otro sabor que elijas.
¿Lo mejor? Las encuentras en cualquier puesto callejero en Mérida y otras ciudades del sureste mexicano.
Aquí te compartimos la historia completa de este postre.
¿Dónde comer marquesitas en la CDMX? Checa este enlace.
En Mérida ve a las clásicas Marquesitas Don Polo, ubicadas en la calle 55 número 506, en la colonia Paseo de las Fuentes.
Coyotas
Para postre o el desayuno, comer una coyota acompañada de una taza de café es la definición del cielo. Esta delicia es tan importante en Sonora que existen decenas -más bien, cientos- de talleres coyoteros en Hermosillo y otras ciudades del estado.
La coyota es como si fuera una gordita dulce. La masa se elabora con harina de trigo, manteca, azúcar y levadura y se rellena con piloncillo, el ingrediente más tradicional.
También es posible rellenarlas con jamoncillo, dulce de calabaza, manzana, fresa, guayaba, membrillo, nuez, dátil y almendra.
Esta es la historia completa del postre.
Calabaza en tacha
En la ciudad de México la conocemos como calabaza en tacha, pero en otras entidades del país la ubican como calabaza en conserva, en dulce o calabaza de Todos Santos (por ser un postre muy tradicional en día de muertos).
Para hacerlo, la calabaza de Castilla se cuece en agua con piloncillo y rajas de canela, y en algunos estados se agrega hojas de higo, tejocotes, guayabas o cañas.
Una manera increíble de comer la calabaza en tacha es servir un pedazo en un plato hondo, cubrirlo con leche y luego espolvorear ajonjolí tostado.
¡Gracias Celia Florián por enseñarnos a amar doblemente la calabaza en tacha!
Buñuelos
Los buñuelos están presentes en muchos países del mundo y cada uno tiene una historia o una razón de cocinarse y comerse.
Al parecer tiene origen árabe o morisco y se prepara con una mezcla de harina de trigo, huevo, agua, sal y manteca de cerdo. Después se fríe en manteca de cerdo o aceite, se espolvorea con azúcar o se baña con miel de abeja o piloncillo.
¿Quieres prepararlos? Aquí tenemos una buena receta.
Churros
Los churros son originarios de España y consisten en una masa a base de harina de trigo, agua, azúcar y sal, que se introduce en un aparato similar a una manga repostera por donde, a presión, nacen unas tiras cilíndricas en forma de estrella que se fríen en aceite.
Se comen rellenos, espolvoreados con azúcar o acompañados de chocolate, crema pastelera o cajeta.
Aquí te contamos la historia completa.
Ate con queso
Este dulce que generalmente se acompaña con rebanadas de queso manchego o fresco nació en Medio Oriente y llegó a México con los españoles.
El ate se elabora con pulpa de fruta que se hace puré y luego se cuece con azúcar.
En algunos estados del norte de México a este postre se le conoce como cajeta.
En la ciudad de México es muy común que las fonditas sirvan una pequeña porción de ate con queso como postre.
