El nitrógeno es un elemento químico con el símbolo N y el número atómico 7; es un gas diatómico transparente sin olor que va de maravilla dentro de un barril mezclado con café para producir una bebida espumosa conocida como “café nitro”.

Al agregar nitrógeno a un café se añaden miles de micro burbujas, mismas que provocan una  sensación en la boca como la de una cerveza. En cuanto a sabor, el café nitro afecta un poco a los receptores del gusto, por lo que te dará la percepción de que es más dulce sin tener que agregar azúcar.

¿Resultado? Una experiencia de café completamente nueva.

El café nitro es básicamente un café frío (ya sea por inmersión o por goteo) al que se le añadió nitrógeno. Este proceso hace dos cosas, principalmente cambia la textura, pero también cambia el sabor del café.

Aunque parezca, no, no estás bebiendo una mezcla extraña de cerveza y café. La idea de una infusión fría con nitrógeno es simplemente una novedad para continuar explorando el gusto por el café.

Donde se pueden aprovechar mejor las cualidades del nitrógeno es en un café con leche frío, mientras que un típico café frío con leche no tiene la espuma de la leche al vapor, el nitrógeno es el ingrediente especial que le regala al café esa textura espumosa. 

Existen dos presentaciones del café nitro: en barril o en latas. En las cafeterías de especialidad puedes encontrarlo en barril, lo cual es muy agradable visualmente al momento de servirlo, ya que resalta una radiante espuma en la parte superior mientras que en la parte inferior se conserva un textura cremosa y sedosa.

También está la presentación en lata, así como las latas de cerveza Guiness, generalmente hay un cartucho o un widget de nitro en la parte inferior de la lata que se activa una vez que se abre la parte superior.

¿Se te antoja probarlo?