Al llegar a Finca Altozano, en Valle de Guadalupe, se distingue una nueva atracción culinaria: Lupe, concepto del chef Javier Plascencia. El que en otra vida fuera un foodtruck, ahora se ha adaptado para ser un establecimiento al aire libre donde se preparan lonches, o tortas, para los visitantes que no quieren perder mucho tiempo en ordenar en un restaurante más formal.
El chef Plascencia explica que decidió llamar Lupe a este proyecto en honor al Valle de Guadalupe, lugar donde está asentado el negocio que inició operaciones el pasado 23 de octubre.
En Lupe se ofrecen lonches, muy al estilo de Valle de Guadalupe, pues ahí se prepara el pan, las verduras son traídas del huerto de Finca Altonzano y la carne de cerdo, borrego y todas las demás proteínas se compran en ranchos de Tecate y Valle de Guadalupe.
De acuerdo con el chef Javier Plascencia, se busca que sea una torta que muestre lo mejor de la zona: muy rica en sabor y con ingredientes locales, por lo que vio la oportunidad y un hueco de mercado que no se estaba tomando en cuenta en el Valle. Pues aunque asegura que hay muchos restaurantes de calidad en la zona, a veces la gente quiere comer rápido y no tienen el tiempo de ir a un restaurante.
Por ello Lupe surge como un lugar divertido y con una bonita vista para los visitantes y locales que quieren disfrutar de una experiencia en el Valle de Guadalupe.
Además se han sumado al proyecto algunas cervezas artesanales y vinícolas pequeñas con un vino de excelente calidad al que buscan apoyar, ya que estos productores no tienen suficientes botellas para estar en los restaurantes.
El concepto es sencillo: llegar, escoger la mesa que más te guste, ordenar y esperar la preparación de los alimentos mientras se disfruta de la vista y llega el olor de la carne a la parrilla.
Debido a que tiene solo unas semanas abierto, el chef Plascencia le ha puesto mucha atención a Lupe. Se compró un ahumador especial para preparar carne de res, pavos y pollos; se planea que en un futuro se pueda ampliar la oferta de los alimentos ahumados, charcutería (jamones y carnes frías) y otros productos.
Para acompañarlos, hay diversas salsas y aderezos, además de verduras encurtidas con un picor moderado. También puedes ordenar papas a la francesa con ajo y queso, tabla de quesos, chicharrón con Tajín, costilla de puerco ahumado y asado, y charcutería. Para los postres, puedes ordenar pay de queso y pastel de chocolate servidos en tarros de vidrio. Si te resultan muy dulces, puedes maridarlos con una cerveza La Lupulosa, de Cervecería Insurgente.
Entre las bebidas, además de la cerveza y vino, cuentan con aguas frescas, una de ellas en particular es el agua de melcocha, hecha a base de piloncillo, originaria de Colombia. La idea surgió por el capitán de meseros que es colombiano y la introdujo porque en aquel país es muy popular.
Sobre la cocina de Baja California, el chef Plascencia dijo que está basada en productos que tiene la región, ya que considera que es una de las cocinas más nuevas que tiene México y se ha desarrollado gracias a todo el producto disponible, a los chefs, cocineros, asistentes y a los cerveceros artesanales que se han sumado a este movimiento.
Sobre el futuro de los foodtrucks, un concepto que se tomó del país del norte, el chef es optimista y piensa que aún tiene mucho camino por recorrer mientras la idea sea buena, pues como señala Plascencia, la gente no solo busca los restaurantes de la zona, también quieren un producto más sencillo y práctico.