Observa tu alacena. Seguramente tienes lentejas, frijoles, chícharos y garbanzos, ¿verdad? Estas son las famosas legumbres, maravillosas porque proporcionan proteínas, fibra, vitaminas y minerales -como hierro, zinc y magnesio-, y porque su consumo ayuda a combatir la obesidad y controlar enfermedades como la diabetes, las afecciones coronarias y el cáncer, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Sin embargo, aunque las legumbres tienen propiedades fantásticas para la salud, en realidad su producción es mucho menor comparada con la de cereales y hortalizas. Además, su consumo ha registrado una disminución lenta pero sostenida en países ricos y pobres en un periodo de 10 años.
Para impulsar su producción y consumo, la ONU nombró al 2016 como “el año internacional de las legumbres”, en el que sensibilizarán a la población sobre las ventajas nutricionales de estas, fomentarán su producción a nivel mundial y el aprovechamiento de las proteínas derivadas de estos cultivos.
Razones para amar las legumbres, hay muchas. Casi no se desperdician –se pueden almacenar durante muchos meses, no se estropean y no pierden propiedades nutricionales- y su producción utiliza mucha menos agua que la carne.
Según la FAO, las legumbres son “altamente eficientes en el uso de agua, especialmente en comparación con otras fuentes de proteína”.
Por ejemplo, la producción de daal (guisantes o lentejas partidos) requiere 50 litros de agua por kilogramo, mientras que para producir un kilo de pollo se necesitan 4 mil 325 litros; para un kilo de carne de cordero, unos 5 mil 520 litros; y para un kilo de carne de res, hasta 13 mil litros de agua.
Actualmente, India es el mayor productor mundial de legumbres, seguida de Canadá, Myanmar, China y Nigeria.
¿Listo para experimentar sabores de otras latitudes en tu cocina? La Red de Información sobre Operaciones Poscosecha de la FAO conserva más de 850 recetas de más de 50 países con el objetivo de preservarlas y promover los ingredientes y platos que son menos conocidos fuera de sus lugares de origen.
Aquí te dejamos algunas que utilizan legumbres. Están en inglés.
Garifoto de caupís de Ghana.
Githeri de Kenya.
Baassi Salte de Senegal.
Papas, garbanzos y cacahuetes de Tanzania.
Ocra silvestre con frijoles y caupís de Zambia.
Arroz com feijao de Brasil.
Tamalitos a la inflación de Costa Rica.
Sopa de habichuelas negras de la República Dominicana.
Frijoles colados de Perú.
Frijoles rojos cocinados y arroz de Estados Unidos.
Bhuna kichuri de Bangladesh.
Budín de arroz con ocho tesoros de China.
Dal de la India.
Curry de garbanzos de la India.
Kichidi de la India.
Frijoles de Baguio con miso de Filipinas.
Chili con Carne de Filipinas.
Frijoles cocinados de Grecia.
Erwtensoep de los Países Bajos.
Chourbat al-bourghol de Argelia.
Falafel de Egipto.
Humus del Líbano.