A diario miles de toneladas de comida se desperdician en nuestro país, lo cual es gravísimo tomando en cuenta dos cosas: la cantidad de personas que no cuentan con los suficientes recursos para comer bien y que una parte de los alimentos que tiramos a la basura no siempre están en mal estado o se puede comer aún caducos.
Ante esto, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha sugerido desde hace tiempo que es mejor usar “consumo preferente” en vez de “fecha de caducidad”. Esto significa que hasta ese momento el producto mantiene todas sus propiedades organilépticas, pero no es perjudicial para la salud.
Sin embargo, existe una delgada línea entre los que aplica la regla y sólo estarán rancios pasada la fecha, y aquellos que sí se descomponen y pueden causar desde dolores de estómago hasta diarrea y vómito.
De acuerdo con El Confidencial, el problema del consumo preferente es que se trata de un concepto muy ambiguo. Hay alimentos que fácilmente nos daremos cuenta de que no sirven por su olor y consistencia, pero hay otros que es mejor no tentar porque pueden ser engañosos. En general las conservas ya sea enlatadas o encurtidas aguantan bastante después de la fecha estipulada, por el contrario, los alimentos frescos como la leche o la crema acidificada pueden estropearse en cuestión de días.
Aquí les dejamos una guía de los productos con los que no hay problema, con todos los demás, por favor, sean cautelosos:
Aunque su fecha de consumo oficial es de 21 días, si lo guardas en el refrigerador aguantará hasta cinco semanas. Si dudas de la frescura de un huevo sólo hace falta sumergirlo en un vaso con agua, si flota ya no debes comerlo.
La gran cantidad de azúcar que contiene funciona perfecto como conservador natural, por lo que aguanta mucho tiempo antes de que sea incomible. Incluso cuando se le forma una capa blanquecina se puede comer sin problema.
Gracias a su alto contenido en sal pueden comerse aunque pase su fecha de caducidad. El inconveniente es que perderán su firmeza y no serán tan crujientes.
Al ser un producto tan procesado y con tanta azúcar aguantan bastante sin ser un peligro. El inconveniente es que se hacen aguadas, pero si tienes un paquete olvidado que quieres rescatar, mete las galletas un ratito al horno y estarán listas.
En realidad la miel de abeja natural no caduca nunca, sólo hay que tener cuidado de que no se contamine para que nos dure décadas. Otras mermeladas y confituras tardan muchos años en ser dañinas para la salud.
Si se guardan en un lugar fresco y seco, pueden durar casi por tiempo indefinido y son alimentos que siguen bien aunque estén caducos. Sólo ten cuidado de no aplicar la misma regla con las anchoas porque sí se echan a perder ya que son una semi conserva.
En realidad estos alimentos ya están podridos cuando te los comes, así que debido a su preparación fermentada durarán mucho tiempo antes de que te hagan daño.
Mientras no dejes el pan a la intemperie y no le salga moho, puedes congelarlo y durará algunos años. Siempre que esté en un lugar seco puedes hacer pan molido con él porque se endurece tanto que cuesta trabajo comerlo.
La mayoría de los alientos se pueden conservar bastante bien en recipientes herméticos por tanto tiempo como quieras aún si la etiqueta dice que están caducos. Probablemente no esté muy fresco pero no le afectará a tu estómago.