La corunda es una variedad de tamal aunque casi siempre de forma triangular, y a veces hasta con varias puntas.
Las corundas, prioritariamente michoacanas de de la zona lacustre y norte del Estado se elaboran, como muchos otros tamales, a base de maíz y se envuelven en hojas de la planta del maíz -no de elote-, entre las cuales se forma un delicioso platillo mexicano que suele servirse con crema, jocoque y en ocasiones acompañando alguna guisado o unos buenos frijoles calientitos.
Los animamos a preparar corundas, las clásicas, de manteca, son nuestras favoritas y con esta receta no necesitamos estar en un mercado moreliano para disfrutarlas, de la mano de Alicia Gironella en el libro Larousse de la cocina mexicana, compartimos el paso a paso de este gran libro y mejor cocinera, así que, manos a la obra.
Batir todos los ingredientes hasta obtener una masa tersa y homogénea.
Precalentar una olla tamalera con agua; cubrir el fondo de la misma con hojas de caña de maíz. Colocar sobre una superficie plana, y de forma perpendicular una hoja de caña de maíz. Acomodar sobre ella una porción de masa, dejando 7 centímetros libres en el extremo inferior.
Doblar el extremo inferior sobre la masa para formar un triángulo. Continar doblando el triángulo de masa a todo lo largo de la hoja, sin perder la forma triangular.
Al final golpear ligeramente las puntas del triángulo contra la superficie de trabajo, de forma que se obtenga un tamal de siete lados. Repetir este paso con la masa y hojas restantes.
Colocar dentro de la olla tamalera las corundas, cubrirlas con las hojas de caña de maíz y cocer durante una hora o hasta que la masa se desprenda fácilmente de la hoja.