Terminan las vacaciones escolares y al parecer las ideas para entretener a los niños en casa escasean. ¿Ya no saben qué hacer para tenerlos ocupados esta semana? Te compartimos una divertida receta que los mantendrá lejos de la televisión y los juegos de video.
Ahora bien, no importa que no sean vacaciones. Puedes hacer esta receta un fin de semana o cualquier simplemente porque los malvaviscos son divertidos de hacer y no se pueden perder la experiencia de jugar a ser alquimistas creando estas delicias esponjosas.
En un recipiente poner la grenetina junto con 1/2 taza de agua a temperatura ambiente y reposar por unos minutos hasta que la grenetina este hidratada. En una batidora mezclar la grenetina junto con la sal y el cremor tártaro y batir hasta que la mezcla esponje un poco.
Aparte, en una olla, colocar el azúcar y la miel de maíz, llevar a fuego medio y cocinar hasta que tome un color caramelo (nunca mover, en cuanto entró a la olla nada más debe de tocar la mezcla). Con un termómetro de comida verificar que la temperatura sea de 120 grados Celsius y apartar.
Con la batidora prendida a una velocidad media agregar la mezcla del azúcar con la miel poco a poco y con precaución a la de cremor tártaro y grenetina. Este paso requiere de mucho cuidado ya que la mezcla del azúcar puede quemar mucho, asíque cuidado con los niños.
Una vez estén los ingredientes mezclados, subir la velocidad a la batidora dejarla unos 5 minutos o hasta que la mezcla tome un color blanco y haya espesado un poco; entonces agregarle la vainilla y volver a mezclar a velocidad alta por lo menos por 20 minutos.
Forrar con papel aluminio una charola, embarrarle el aceite y después espolvorear la maicena, verter la mezcla de los malvaviscos sobre la charola y con una espátula ─la cual primero sumergimos en agua fría─ emparejar la superficie.
Dejarlo enfriar a temperatura ambiente. Una vez que vean una especie de nata se empieza a formar en la parte superior espolvorear la mitad del azúcar glas y enfriar toda la noche a la intemperie.
Ahora si la parte que más les gustara a los niños: con moldes de diferentes formas cortar los malvaviscos y espolvorear el resto del azúcar glas. Se pueden guardar por dos semanas en la alacena sin ningún problema.
Existen un sin fin de variaciones que se pueden hacer a esta receta base: se le puede agregar cacao a la hora de batir para hacerlos de chocolate o añadirles colorantes naturales para darles colores divertidos.
Si les gusta la menta pueden agregarle 1/2 cucharadita de extracto de menta en vez de la vainilla y quedan súper frescos y ricos. El chiste es que ustedes se dejen llevar por su imaginación y antojo.