La tortilla de patatas es una receta que da identidad y orgullo a la cocina española. Se puede comer en cualquier momento: desde que sale el sol en el desayuno con un cafecito o bien, acompañar una cerveza cuando quiebra la tarde.
Aunque tiene fama de ser complicada de hacer, tan solo es cosa de tener paciencia a la hora de ponerse manos a la obra. Aquí el fuego bajo deberá ser tu aliado en gran parte del procedimiento.
Los españoles suelen comerla medio hecha, es decir, blanda en el interior. Esto asegura que la textura será blanda y muy sabrosa. No se te olvide sazonar bien pues las papas absorben mucha sal y puede quedar sosa.
Es una interpretación a la omelette francesa. sólo que esta es más gruesa y prepararla te va a asegurar que tienes comida en el refrigerador por días pues rinde muchísimo.
Aprovecha cualquier ingrediente que tengas en casa para complementar la receta: le van bien unas rodajas de chorizo, lajas de pimiento, espinacas blanqueadas o básicamente cualquier cosa a la tortilla española.