En sabores se rompen géneros y las endivias tienen, claramente, un sabor particular que divide paladares. Entre más tiernas y frescas más crujientes sus hojas y se vuelve suave y delicioso ese característico sabor amargo que, a nosotros, nos emociona.
Hoja por hoja en crudo acompañadas de una buena vinagreta o una mezcla de yogurt y nueces, las endivias son buenísimas, pero ahora vayamos más allá y suavicemos el sabor al horno.
Preparación
Colocar las mitades de endivia en una charola para hornear con el corazón hacia arriba. Rociar un poco de aceite y sazonar con sal y pimienta. Hornear a 120 grados C durante 40 minutos. Servir las envidias calientes o al tiempo.