Para muchos la clave está en la masa, para otros en los ingredientes, pero para mí, está en la salsa. Hacer una pizza no es cosa sencilla, requiere de tener unas buenas habilidades culinarias, pero sobre todo necesitas un gran sazón. La salsa lo es todo, es el pegamento que une todos los demás componentes y que te hacen disfrutar una de las comidas más relevantes en la historia. Por ello, no puedes dejar de saber, cómo preparar salsa para pizza, aquí te explico.
Salsa de Tomate en la Pizza: como el lienzo de un pintor
Foto: la salsa de tomate será siempre el ingrediente secreto en la pizza, así que descubre cómo hacer una salsa rica y de gran sabor/ Shutterstock
La salsa de tomate que tienen casi todas las pizzas, es un sabor estándar, pero perfeccionar su sabor te distinguirá de otras pizzas caseras. Le dará la humedad necesaria a una masa que por naturaleza, lo requiere para ser consumida.
Una salsa muy especiada podría ser abrasiva contra el paladar, por lo que tendrías que encontrar el punto perfecto. La podrías comprar en el supermercado, pero de qué sirve consumir alimentos ultraprocesados, ¿no prefieres lo más natural posible?
También podrías ir a diferentes lugares a comer en la Ciudad de México a comer de las mejores pizzas, ¿pero, no prefieres ahorrar? Además, nada levanta el ánimo y alimenta la satisfacción del deber cumplido, como hacerlo todo por tu cuenta.
Así que arremángate esa camisa, ponte ese delantal escondido en el horno y ¡manos a la obra!
Cómo preparar salsa para pizza
Foto: Esta receta es herbal, dulce y perfecta/ Shutterstock
Ingredientes:
- 10 Tomates medianos (pueden ser enlatados, pero nunca guaje)
- 2 dientes de Ajo
- 1 Cebolla blanca mediana
- 1 cda. Orégano seco
- 1 cda. Albahaca seca
- 1 hoja de Laurel
- Aceite de Oliva
- Pimienta Negra
- Sal
Preparación:
- Cortar en julianas finas la cebolla y picar finamente los dientes de ajo.
- En una sartén grande a fuego medio, agregar abundante aceite de oliva y darle tiempo para calentar.
- Sofreír las rebanadas de cebolla hasta que queden muy blandas. Esta receta no requiere azúcar, pues el dulzor de la salsa lo obtendrá de la caramelización de la cebolla pochada.
- Agregar los dientes de ajo al sartén y sofreír por unos minutos sin que se lleguen a quemar.
- Si utilizas tomates crudos, quitar tallo y cortar en cuartos. Agregar a la sartén con una taza de agua. Si utilizas tomates enlatados, todo irá directo a la licuadora.
- Una vez que los tomates estén muy suaves y el agua se haya evaporado, es momento de licuar.
- Mezclar los tomates junto con la cebolla, ajo, pimienta, albahaca y sal.
- Debe quedar una pasta tersa pero gruesa.
- En una cacerola grande a fuego medio, calentar aceite de oliva.
- Añadir la salsa de tomate con mucho cuidado y sofreír por unos minutos.
- Agregar el orégano seco encima y la hoja de laurel.
- Calentar a fuego bajo por 15 minutos, para que los sabores se concentren.
- Retirar la hoja de laurel y dejar enfriar antes de usar en cualquier pizza.
Ahora tienes la receta secreta para una pizza perfecta. Aprender cómo preparar salsa para pizza te dará la chance de hacer una pizza con gran sabor y que todo mundo recuerde.
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