Calor, fiesta y jugo de tomate, la combinación perfecta para un domingo soleado. Cuando el termómetro sube, nada como refrescarse con esta deliciosa bebida. Imagina un tarro helado lleno de ese líquido rojo y espumoso, con ese toque de picante que te hace sentir vivo. El empujón que necesita tu cuerpo después de una noche de baile y diversión.
Un excelente aliado para los domingos por la mañana; así como el clásico bloody mary (también popular para curar la cruda) o las mimosas (para disfrutar de un plan más ‘relax’) esta bebida no puede faltar en tu repertorio de fin de semana.
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Y ¿sabías que la receta del famoso jugo de tomate con almeja tiene su origen en Mexicali? Así como la ensalada César o la comida china estilo Mexicali. Parece que la península es un nido gastronómico en el que nacen propuestas gastronómicas bastante interesantes.
Todo empezó en 1963 en el Hotel Lucerna, cuando un turista necesitaba desesperadamente aliviar su cruda.
El barman, explotando su creatividad, utilizó los ingredientes que tenía a la mano, como el jugo de tomate al cual le agregó un chorrito del caldo de abulón rojo que en ese momento estaba mezclando. Al ver el buen resultado, la fama de esta bebida se extendió, al mismo tiempo que se fue perfeccionando y se volvió más fácil de preparar, incluso con envases que ya tienen casi todo listo para que lo mezcles en casa y se sustituyó el caldo de abulón por el de almeja y se le agregaron unas cuantas gotitas de salsa de soya y picante.
Así que si traes antojo de apaciguar el calorón (o la cruda) te contamos cómo preparar unas buenas miches, con ingredientes que seguro tienes a la mano.
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¡Listo para disfrutar de esta refrescante michelada preparada! ¡Salud!
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