¿Te habías preguntado la diferencia entre un bistró y tal vez una cantina? ¿Qué los hace diferentes? Ambos son un tipo de restaurante, pero comer sería muy diferente en uno u otro. Viajemos en el tiempo, conoce la historia de la restauración y aprende el por qué existen diferentes tipos de restaurantes.
La restauración es un término poco ocupado en la industria alimentaria, pero que define por completo el actuar de este gremio. A través del tiempo, cada uno de estos lugares para comer, redefine parte de la cultura gastronómica de cada región.
Comer es un acto político y elegir dónde hacerlo, es un acto cultural. La restauración es la definición de “restaurar el espíritu” a través de la comida. Los restaurantes obtienen su nombre de este verbo, pues mediante la comida y la bebida, dan la oportunidad al comensal de reabastecerse de energía y nutrientes para continuar su vida.
La historia de la restauración es extensa, pero realmente importante para entender este mundo. Descubre los diferentes tipos de restaurantes y cómo influyen en la cultura alimentaria de cada país.
Originado en Francia, el concepto de restaurante llegó a finales del siglo XVIII. Previamente a los restaurantes, durante la Edad Media, se solía consumir comida fuera de casa, única y exclusivamente en las tabernas y posadas.
Estos lugares funcionan como asilos temporales para viajeros, en ellos podías encontrar descanso y comida casera. Con el paso del tiempo, viajar cambió y esto motivó a una serie de modificaciones en la forma de hacerlo.
El primer restaurante moderno, surgió de la necesidad de crear una experiencia especial, en la que el viajero podía disfrutar del acto de comer. Un servicio individualizado y especializado que ofrecía platillos preparados al momento.
Los restaurantes fueron una oportunidad que no todos podían disfrutar, un lujo burgués que solo algunos podían pagar. El primero se abrió en París en 1765 por un hombre llamado Boulanger.
Su establecimiento, que se anunciaba como un lugar para restaurar la salud, dio nombre a la palabra “restaurante”. Este tipo de negocios se viralizó por todo Europa, gracias a su increíble rentabilidad y demanda.
Con el paso de los años y los kilómetros, estos lugares pasaron a formar parte de la cultura local y se diferenciaban de acuerdo a su entorno. Por esto mismo, se crearon diversos tipos de restaurantes, cada uno con una particularidad.
Los restaurantes no solo son una categoría de la cultura gastronómica y no solo son espacios físicos en los que comer. También son parte de un reflejo evolutivo de la cultura de las diversas comunidades.
Son espacios de convivencia y riqueza cultural en los que se aprecia el acto de comer, pero sobre todo de la interacción humana. Sin los restaurantes, el acto de comer dejaría de ser social y sería simplemente una necesidad fisiológica.