Recientemente me surgió la duda si existe una diferencia entre la teína y cafeína, es por ello que me di a la tarea de investigar y esto fue lo que encontré.
Hay quienes afirman que la teína es una sustancia diferente a la cafeína encontrada en los granos de café, pero la llamada teína, químicamente hablando, es la misma molécula que la cafeína, pero encontrada en diferente planta, se detalla en el sitio web Punto de Té.
El origen de la confusión no es reciente; la cafeína fue identificada en 1819 por el químico alemán Friedlieb Runge, ocho años después, otro investigador aisló la teína del té. Fue hasta 1838 cuando quedó claro que ambas sustancias eran la misma.
La teína es el nombre que se le otorga a la molécula de cafeína cuando se encuentra en el té, detalla la tecnóloga de los alimentos Beatriz Robles a El País.
“La cafeína es un alcaloide de la familia de las metilxantinas que se puede encontrar de forma natural en numerosas especies de plantas, entre las que se incluyen la planta del café y el té, pero también en la del cacao, la yerba mate o el guaraná. Para referirse a la cafeína de cada una de ellas se usan distintas nomenclaturas: teína, guaranina, mateína… pero siempre nos referimos al mismo compuesto”.
Por su parte, Damián Seijas barista profesional, y medalla de oro en Spain Barista Champion, indica que las diferencias entre la cafeína y la teína son de tiempo y duración. La teína tarda en hacer más efecto, pero dependerá también del tipo de té. Es otro estimulante, pero diferente al café, que es una bebida más compleja y aromática. La cafeína es hidrosoluble, se disuelve muy fácil y muy bien, se lee en Men’s Health.
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Los efectos de la cafeína estimulan el sistema nervioso central, generando un mayor estado de alerta y concentración que puede ayudar al aprendizaje.
Otra de las consecuencias de la cafeína y sus derivados es que reduce la sensación de cansancio. De hecho, la cafeína mejora el rendimiento deportivo gracias al efecto que produce en el organismo, indica Punto de Té, tienda especializada en esta bebida en España.
Asimismo, detalla que existe otra creencia, que afirma que el té negro, contiene niveles más altos de cafeína que el té verde o el té blanco. Esto es erróneo. Se ha demostrado científicamente, que el proceso de oxidación no aumenta el nivel de cafeína en las hojas de té.
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