Esta mañana del 11 de marzo Google cambió –como es costumbre– su doodle animado. Esta vez, la página de inicio del navegador está lista para homenajear a una de las bebidas consentidas por los baristas y amantes del café: el Flat White.
En esta ocasión, al abrir tu navegador en la página inicial de Google se puede apreciar una imagen con una taza de Flat White. Mientras que las dos letras “o” de la palabra se ilustran con dos canastas de filtro que se utilizan en las máquinas de espresso. Al lado, los acompaña una taza de café espumada y algunos granos de café.
El doodle de Google tiene el objetivo de celebrar o conmemorar eventos, logros o personas que han marcado un antes y después en el mundo. En ese sentido, el servidor de internet cambia su logotipo en la página principal por un día.
El Flat White es una bebida de café muy popular originaria de Melbourne, Australia, que se remonta a principios de los años 80.
Se elabora con café espresso al que se le añade leche vaporizada microespumada, con una textura suave y sedosa que equilibre perfectamente el café y la leche.
A diferencia del cappuccino, el Flat White se caracteriza por tener una proporción mayor de leche y una capa de espuma más delgada, servida en una taza pequeña de cerámica de unos 150 a 160 ml.
Otro de los elementos que caracteriza un flat white es que tradicionalmente incorpora latte art.
La leyenda sugiere que el Flat White surgió como un “accidente” al preparar un cappuccino.
En general, el Flat White es conocido por su sabor intenso a café y su textura suave. Tiene un sabor en el que destaca mucho el espresso, por lo que es muy apreciado por los amantes del café en todo el mundo
Este café resurgió en popularidad en la cultura barista y es comparado frecuentemente con el café latte o cappuccino. Aunque se originó en Australia, ha habido una disputa entre australianos y neozelandeses por su autoría.
Preparar un Flat White requiere precalentar la taza de cerámica, lo que conserva la temperatura del café y realza su sabor. Esto se debe a que la cerámica retiene bien el calor y evita que el café pierda temperatura al contacto.
Además, la textura de la leche se mantiene más cremosa al verterla en una taza caliente.
Para precalentar la taza, simplemente se llena con agua caliente y se vacía antes de servir el café preparado.
Este pequeño paso contribuye significativamente a la calidad y experiencia del Flat White.
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