Nueva Orleans es probablemente la ciudad más rica gastronómicamente hablando de todo Estados Unidos. Una ciudad que alberga una gran cantidad de fiestas, celebraciones y platillos heredados de diversas culturas establecidas en el pantano. Conoce una de las gastronomías más ricas del mundo, admirada por su diversidad cultural e increíbles productos locales. Sorpréndete con estos 7 platillos de la comida típica de Nueva Orleans.
La ciudad de Nueva Orleans se distingue por su vibrante y alocada energía, un espacio alegre y con una intensa puesta en escena. Ubicada en el estado de Luisiana, esta es una ciudad que ha pasado por largos procesos históricos, culturales y sociales para convertirse en el centro cultural del sur de Estados Unidos.
La ciudad se distingue por su fusión cultural y artística, algo que se ve plasmado también en su gastronomía. La comida típica de Nueva Orleans está basada en una rica y diversa historia del territorio. Diversas culturas se han posicionado y dejado marca en la zona, especialmente la francesa, africana y española.
Todas estas formas de entender el mundo se entrelazan para crear una visión única en el mundo. La cocina típica de Nueva Orleans se basa en la creación de platillos con sabores únicos y muy audaces. La fusión de técnicas culinarias de diferentes partes del mundo junto con la gran abundancia de productos locales creó una de las cocinas más interesantes en el mundo.
La cocina de Nueva Orleans se destaca por el uso de muchas especias, condimentos, granos y mariscos. A la gastronomía del estado de Luisiana se le conoce como cocina criolla, una mezcla de influencias españolas, francesas, africanas, caribeñas y estadounidenses.
La cocina criolla está vinculada con las tendencias y estilos europeos clásicos que se adaptan a los sabores locales. Es un tipo de cocina que se relacionaba mucho con la clase aristócrata y adinerada de Nueva Orleans durante la Guerra Civil de Estados Unidos.
La influencia española tiene una gran relevancia en esta cocina, especialmente la de las Islas Canarias, quienes solían utilizar pimientos, cítricos y principalmente granos en sus preparaciones. Tanto el arroz como los frijoles, son de los ingredientes más relevantes de la cocina criolla en Nueva Orleans.
La cocina cajún está relacionada con todas aquellas personas descendientes de los desplazados franco-canadienses que llegaron al estado de Luisiana. Debido a una disputa territorial entre Francia e Inglaterra por la región de Acadia en Canadá, los habitantes de muchos de estos territorios se vieron forzados a migrar.
Nueva Orleans recibió a una gran oleada de ellos, quienes traían consigo una cocina rústica y de preparaciones simples. Gracias a los increíbles productos locales, la cocina cajún sobrevivió y evolucionó.
La gastronomía cajún está basada en gran parte en la cocina francesa tradicional, principalmente basada en las técnicas culinarias clásicas. La cocina cajún, además de los pantanos y humedales de la región, está estrechamente vinculada con la cultura sureña de Estados Unidos, símbolos de identidad cultural.
La cocina cajún suele ser considerada muy fuerte, el uso de especias es muy característico de esta gastronomía. Por muchos años, la cocina cajún estuvo muy estigmatizada, pues estuvo vinculada con las minorías del estado, sin embargo, a partir de los años 80 se reivindicó gracias al popular cocinero Paul Prudhomme.
Esto tuvo un efecto positivo, pues atrapó la atención de los turistas y un gran grupo de inversores que intentaron cubrir la demanda del mercado.
Conoce algunos de los platillos más representativos de una gastronomía diversa y abundante. Déjate llevar por el sabor del pantano y goza de una cocina vibrante, llena de historia y cultura.
Es el platillo por excelencia de Luisiana, el gumbo es un platillo criollo que hace referencia a una hortaliza de origen africano. El producto estrella de esta receta es la okra, gombo o quimbombó, una especie de calabaza cuyo sabor es muy intenso. El gumbo es un guisado o estofado con caldo, que se puede realizar con casi cualquier tipo de carne. Pero el tradicional es el gumbo de mariscos, que se elabora con camarones, ostras o cangrejos.
Un clásico de la gastronomía cajún , es un platillo que se prepara con arroz, pollo, langostinos y muchas especias. Tiene un sabor picante intenso y una gran variedad de verduras como pimiento, cebolla, apio, hinojo y ajo. Aunque se caracteriza por tener especias como tomillo, pimentón, comino, orégano, pimienta y guindillas.
Es un clásico de la comida criolla callejera, el po´boy es un sándwich de mariscos. Es una de las comidas típicas de Nueva Orleans y es muy representativa de la comunidad africana de la ciudad. Po´boy es la abstracción de poor boy (niño pobre), nombrado así por unos conductores de tranvía que se quedaron sin trabajo tras una huelga. Actualmente se prepara con mariscos rebozados, generalmente camarones o langostinos, en una baguette con mayonesa, lechuga y pepinillo. Aunque el clásico es un con ostras rebozadas y un toque de salsa tabasco.
En Nueva Orleans se acostumbra comer todo tipo de mariscos, su ubicación entre Golfo de México y una gran variedad de ríos, pantanos y humedales, la hace un sitio perfecto para la producción y recolección de estos animales. El crawfish o cangrejo de río es uno de los más apreciados. Se acostumbra preparar hervidos en ollas gigantescas junto con elotes dulces y papas. Es común que los sirvan de baldes de metal directo a tu mesa.
Además de franceses, una gran cantidad de italianos llegaron a Nueva Orleans. Consigo trajeron productos, técnicas y preparaciones típicas de Italia, la muffuletta es una de ellas. Un pan siciliano redondo que sirve para hacer bocadillos. Se acostumbra servir con quesos (emmental y provolone) y fiambres italianos ( salami y mortadela), además de una ensalada de aceituna y encurtidos. El pan se cubre de aceite de oliva y se rellena.
Al igual que muchas preparaciones criollas puede variar el tipo de proteína animal para prepararlo. En ocasiones podrás prepararlo con ancas de rana, después con langostinos y también con cangrejos de río. Pero el étouffée tradicional se prepara camarones, pimiento rojo, cebolla y apio, mantequilla, harina, pimienta blanca, pimienta negra, pimentón dulce, pimentón picante, ajo en polvo, cayena, tomillo y mostaza.
Por último, no podíamos dejar de lado la panadería y el lado dulce de la ciudad. Aunque existen una gran variedad de postres de la comida criolla de Nueva Orleans, como la Banana Foster, Pralines, Budín de Pan, Cobbler de zarzamora o melocotón, el más representativo es el Beignets, una especie de buñuelo elaborado con una masa de harina y huevo frita, cubierta de azúcar glass.
La cocina de Nueva Orleans es una gastronomía rica y sumamente diversa. Se le reconoce por su complejidad de sabores y por aplicación de técnicas culinarias que se transmiten de generación en generación. Una gastronomía que busca resaltar el sabor natural de sus ingredientes locales y una riqueza cultural como ninguna.
En Luisiana, la comida no es solo una necesidad sino un estilo de vida, que refleja la poderosa herencia cultural de múltiples civilizaciones. Nueva Orleans, a través de su comida típica nos invita a un viaje memorable y especial, disfruta la gastronomía del pantano.