Rojo, brillante, blando y pequeño, el piure es un extraño marisco chileno apreciado por su sabor. Se suele comer crudo con cebolla picada, cilantro y limón. Su complejo aspecto rocoso por fuera y baboso interior ha llamado la atención, pues parece sacado de la película de Alien. Conoce el piure, un animal marino de sabor intenso y muy apreciado en la gastronomía chilena.
Es una especie de urocordado, un animal invertebrado de la clase Ascidiacea. Su nombre proviene del idioma mapuche y se le conoce como piwü, que al español se tradujo como piúr (marisco rojo y comestible). Se suelen encontrar en las costas de Perú y Chile.
El piure es similar a una roca marina, tiene una colpa que cubre el interior, de color rojo intenso. Su sabor es similar al del metal, por su alto contenido de yodo. Su apariencia es realmente fea, sin embargo, es un alimento con un gran valor nutricional, pues aporta una gran cantidad de hierro.
Se suele consumir en crudo o cocido, hay que sacarlo de la roca y cortarlo en pequeños pedazos para consumirlo. Este blando molusco se consume localmente con cebolla picada, cilantro y mucho limón o también en empanadas. Es común encontrarlo en guisos y sopas, como la cazuela chilota, un guiso típico de Chile.
La cazuela chilota es una especie de caldo que se prepara con cholgas (moluscos), zanahoria, zapallo (calabaza), porotos (pimientos), ajo y maíz, se acompaña de piure y es un rico caldillo de mar. Parte del legado gastronómico mapuche.
En el sur del país, es tradición sacarlas de la roca, colgarlas y apilarlas en una cuerda, se dejarán al aire libre por días para secarlas y obtener un sabor más intenso.
En los últimos años, el piure ha llamado la atención de los chefs de la alta cocina. Un alimento de lujo que se extrae de pueblos pesqueros para ofrecerlo a elevados precios como un producto “exótico”.
Un ejemplo de ello lo podemos encontrar en el restaurante Boragó, uno de los restaurantes de alta cocina más reconocidos de todo Chile. Rodolfo Guzmán, chef en jefe, ha puesto su atención en el estudio e investigación de este animal. Inclusive uno de los platillos del menú invernal era un pesto marino, en el que combinaba el piure con algunas algas marinas.
Más allá de su extraño aspecto, similar al de un extraterrestre, el piure es uno de los productos más sofisticados del mar. Aunque parezca un tanto desagradable, su composición y sabor es muy valioso para la gastronomía chilena.