Cocinar por momentos puede ser un poco intimidante. Fuego, productos inflamables y objetos afilados podrían asustar a cualquier entusiasta de la cocina. La realidad es que no hay nada que temer, sino mucho que aprender. A mayor conocimiento, mayor confianza en tus habilidades. Por ello, te compartimos estos valiosos consejos sobre cómo freír y hacerlo de manera correcta.
Freír es un tipo de cocción en la cual un alimento se introduce parcial o completamente en algún tipo de grasa a elevadas temperaturas. El resultado de este tipo de cocción, causa en la textura del alimento un cambio en su composición, pues se vuelve más duro, crujiente y de color dorado.
Es un método de cocción muy popular que ha existido por años. En sí, freír o fritura, es un proceso en el que se seca el alimento a través de grasa caliente. En este proceso de fritura existe un fenómeno que se llama transferencia de calor, en el cual sale agua y entra aceite al producto, ocasionando una cocción uniforme dentro y fuera del alimento.
Se consigue tener amplios beneficios organolépticos (que se distinguen con los sentidos) como un sabor más acaramelado (reacción de Maillard), textura crujiente y agradable, así como mayor versatilidad para combinarlos con otros ingredientes.
Es cuando fríes un alimento en abundante grasa, es decir, la fritura profunda es cuando sumerges por completo un alimento en grasa y lo cocinas a una alta temperatura. Obtienes una cocción uniforme en todo el producto. Se utiliza por lo general para enharinados, empanizados, directo sobre el alimento y rebozados. Se realiza generalmente en freidoras de gran tamaño o en cazos de fondo.
También conocida como fritura parcial, es aquella en la que se utiliza poco material graso y se tiene una ligera cocción superficial. Se suele utilizar en sartenes de escasa profundidad y no es muy invasiva para el producto. En México se le suele conocer como sofreír o rehogar.
Aunque no es un tipo de fritura, tiene muchas semejanzas con la fritura superficial. La pequeña diferencia radica en el constante movimiento del alimento. El salteado es una técnica de origen francés, en la que se cocinan alimentos con poca cantidad de grasa a fuego muy alto, pero en constante movimiento. Aporta húmedad, color y sabor.
El punto de humeo es la temperatura límite en la cual un aceite o cualquier grasa comienza a descomponerse. Cuando un aceite supera este punto de humeo, se liberan compuestos dañinos y sabores desagradables.
Se le llama punto de humeo, porque una vez que la grasa o aceite está descompuesto, comienza a liberar humo, el cual es muy peligroso. Freír alimentos en este tipo de productos, solo puede afectar tu salud.
A temperaturas elevadas, las grasas y aceites liberan compuestos como la acroleína, un aldehído que puede causar a largo plazo cáncer o defectos de nacimiento. Es importante evitar que los aceites grasos y el glicerol de los aceites se hidrolicen, pues son muy peligrosos para la salud.
Para evitarlo es importante seguir las indicaciones sobre cómo freír de forma adecuada, no solo para crear productos de gran sabor, sino saludables. Sin duda, la temperatura del aceite o grasa también juega un papel preponderante.
Como todos los alimentos, los productos fritos no deben consumirse en exceso. Puedes consumir productos fritos en una dieta balanceada. Pero cocinarlos de forma correcta, será imprescindible. Cada aceite o grasa tiene sus propias indicaciones de uso, principalmente a la temperatura máxima para evitar el punto de humeo.
La temperatura ideal recomendada para freír es entre los 175°C y los 185°C. El punto exacto para obtener los resultados esperados es a los 180°C, debajo de esta cantidad tienes el riesgo de que los alimentos tarden en freírse y absorban más aceite.
Aunque hay aceites que soportan altas temperaturas (240°C) sin quemarse, es recomendable hacerlo a los 180°C pues reduce la probabilidad de desestabilizar el aceite.
Es importante tener en cuenta, que si vas a freír grandes cantidades de alimentos en fritura profunda, tengas pedazos del mismo tamaño, para que el aceite o grasa cubra cada parte del alimento y tengas una cocción pareja.
Ahora sí estás más que lista. Con esta guía práctica sobre cómo freír y cómo se debe utilizar el aceite de forma correcta, podrás preparar todo tipo de frituras deliciosas. Recuerda que siempre es importante mantener una dieta balanceada y equilibrada, no te restrinjas, pero no abuses y eso te ayudará a mantenerte sana.
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