En el Día Internacional de la Lucha contra los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), que se conmemora este 30 de noviembre, platicamos con Ana Pau Molina, creadora del movimiento Acuerpada, que nació luego de vivir 13 años a dieta y aprender a odiar su cuerpo.
“Cuando estaba más flaca muchas cosas se facilitaban entre ellas conseguir ropa más fácil […] Algo súper duro de las dietas es que nunca funcionan, ninguna intervención para la pérdida de peso funciona en el 90% de los casos”.
Foto: @acuerpada
La OMS define los trastornos alimentarios como enfermedades mentales que se caracterizan por la excesiva pérdida de peso de manera deliberada por parte de una persona, arriesgando su propia salud por culpa de ayunos continuos y prolongados, aplicando técnicas poco saludables para lograr el objetivo principal el cual consiste en no engordar.
Sin embargo, estos trastornos alimentarios no surgen de la noche a la mañana ya que existe una sistema creado para odiarnos y así buscar una constante “perfección”, a través de los cuerpos heteronormativos que en todo momento nos reiteran que solo viéndonos así seremos aceptados. Además nos han hecho saber que existen alimentos que son nuestros enemigos y que no merecen ser consumidos.
Cultura del bienestar o cultura de dietas escondida
Ana Pau Molina asegura que culturalmente existe un discurso que nos dice que disfrutar de la comida está mal, no solo es por el hecho de engordar sino por el deseo que despierta, y que se ha entrelazado con la “cultura del bienestar”, es decir, con la cultura de dietas escondida y la conducta de seguir cuentas en redes sociales que nos dicen que sí y qué no comprar en los supermercados.
De acuerdo con la psicóloga y activista, en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales y psiquiátricos se encuentran los TCA’s que conocemos (bulimia, anorexia) pero está por agregarse uno más. Se trata de la ortorexia que consiste en comer todo lo limpio, puro y perfecto pero que al final conlleva un malestar mental y psicológico.
“Con el tiempo algo que parece que es una obsesión saludable, acaba no siendo saludable al menos bajo la definición de la OMS que es un completo bienestar físico emocional y social. Las personas que se obsesionan con los “alimentos saludables”, […] rompen su salud mental y social. Entonces por buscar la imaginaria salud física que pensamos que nos va a dar comer alimentos puros, perdemos dos aspectos que son igual de importantes”.
Estándares de belleza a través de redes sociales
La llegada de las redes sociales a nuestras vidas ha traído muchas cosas positivas así como negativas y si hay algo que tenemos que recriminarles es el impacto que han tenido en cómo vemos nuestros cuerpos.
La creadora de Acuerpada nos explica que detrás de videos titulados ¿Qué cómo en un día? se busca obtener el cuerpo de la personas que están al frente de la pantalla, sin embargo, se trata de un tema mucho más complejo.
Es como si buscáramos tener un cuerpo similar al de un deportista, es muy complicado incluso haciendo el mismo ejercicio, indica Ana Pau. Señala que las personas que son buenas en ciertos deportes son buenas porque tienen ese cuerpo que facilita ese deporte, no al revés.
Foto: TikTok
Aclara que eso no impide que podamos trabajar nuestra destreza, flexibilidad y agilidad, sin embargo, señala que la realidad es que hay ciertos cuerpos que desde niños son más ágiles para ciertas cosas, y así mismo pasa con la comida ya que se trata de un concepto muy complejo porque el acto de comer es social, es cultural, es biológico que depende de muchas cosas. Los mexicanos no comemos lo mismo que un español, inglés, marroquí.
Di no a las restricciones alimentarias
Molina detalla que evitar comer un alimento solo hará que cuando tengamos un mal momento emocional comeremos todo lo que podamos.
Es decir, si crecimos con la idea de que los chocolates solo engordan y a través de redes sociales, e incluso en un consultorio médico, nos reafirma esa idea dejaremos de comerlos aunque nos gusten y eso aumentarán nuestras ganas de comer y en un mal momento comeremos todos los chocolates que no nos permitimos comer.
“Todas las comidas tienen un lugar en nuestra alimentación y no tendríamos por qué tenerles miedo, de todas formas las vamos a comer ya sea en un atracón, o sea, normalizandolas e integrándose a nuestra vida de una forma más balanceada, pero el balance no viene desde el control”.
¿Cómo sé que tengo un TCA?
Ana Pau enlistó algunas características que debes tomar en cuenta si estás dudando que puedes tener un TCA o si sospechas que alguien cercano a ti puede estar teniendo una conducta de riesgo.
- Pensamientos de culpa al comer
- Preocupación por subir de peso
- Culpa por no hacer ejercicio o cuándo dejo de hacerlo
- Miedo a salir a la calle porque verán mi cuerpo
- Pensar todo tiempo en comida y en qué voy a comer
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¿Qué es la gordofobia? Y cómo no ser parte de ella
De acuerdo con Molina, la gordofobia es un sistema de creencias que está guiado por la idea de que un cuerpo delgado es mejor que uno gordo. Señala que cualquier comentario que esté indicando en “estarías mejor delgada” es indicador de un problema.
Te invito a que elimines de tu vocabulario todas aquellas frases como: “te vendría bien una dieta”, “te veías más bonita delgada”, “ya te ves más cachetona”, “come menos por tu salud”.
Además de estas frases violentas, Ana Pau señala que tampoco se debe de opinar sobre lo que la gente está comiendo ya que realmente al observar qué está comiendo alguien no puede saber nada.
“Si estuviéramos en una mesa y todos estuviéramos comiendo una ensalada, puede ser que yo la esté comiendo porque es la única comida del día y me estoy saliendo de mi dieta porque tiene aderezo, que tú la estás comiendo porque es la primera vez que comes verdura en la semana. Puede ser que otra persona se lo está comiendo porque le da miedo pedir otra cosa”.
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Protocolo de actuación en los TCA’s
Ana Pau enlistó algunas herramientas que deberían tomar en cuenta aquellas personas que están pasando por algún TCA o que tienen problemas constantes con su familia debido a su peso y cuerpo.
En primer lugar, de ser posible, atenderse con atención psicoterapéutica. Así como buscar alguna persona segura dentro de una reunión, alguien que si hay un comentario horrible te pueda dar la mano por abajo en la mesa.
Si ya estás pensando en ir a terapia pero tienes miedo, Molina señala tres puntos que debes de tomar atención a la hora de escoger a tu terapeuta:
- Buscar una persona que sea anti gordofobia ya que muchos psicólogos tratan los TCA’s junto con la obesidad, es decir, bajan de peso a las personas y al mismo tiempo intentan atacar a los TCA’s.
- Tiene que ser una persona que tenga formación en TCA. Es tu derecho como paciente pedir todos sus documentos que lo avalen. (Cédula profesional, certificados, diplomas).
- Por último y muy importante es que te caiga bien. Tiene que ser alguien con quien hagas un buen vínculo.
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No necesitas adelgazar
No te preocupes si no puedes buscar ayuda profesional personalizada, ya que Ana Pau nos cuenta sobre las herramientas que puedes usar a tu favor en caso de no poder pagar una terapia.
Toma a tu favor, podcasts en donde se hable sobre la gordofobia o TCA. Ana Pau cuenta con un proyecto que se llama “No necesitas adelgazar” en donde puedes escuchar diferentes historias. Asimismo, pone a tu disposición libros que te ayudarán a sanar tu relación con la comida, comer y tu cuerpo.
Que este Día Internacional de Lucha contra los Trastornos Alimentarios solo sea el inicio para abrazar tu cuerpo y trabajar todos los días por amarlo y aceptarlo. Habítalo, aliméntalo, cuídalo y escúchalo, recuerda que todo lo que eres hoy y lo que has logrado es gracias a él. ¡Te envío un fuerte abrazo!
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