Si buscas una guarnición elegante, fácil y deliciosa que acompañe tus platillos de manera perfecta, no hay nada mejor que un puré de papa suave y cremoso. Este clásico plato reconfortante es el delirio de chicos y grandes.

Además, el puré de papa tiene la versatilidad de convertirse en la opción ideal para cualquier día de la semana, como para acompañar una jugosa lasaña o una milanesa de pollo empanizada; hasta  para celebraciones especiales como bodas, cenas navideñas o de Año Nuevo. Su increíble capacidad para absorber los jugos de la carne, los vegetales al vapor y las salsas lo convierten en la guarnición ideal.

Sin lugar a dudas, aprender a preparar un puré de papa cremoso será una habilidad imprescindible en tus recetarios y en tu vida. 

Un poco de historia…

El puré de papa es uno de los platos más populares en la cocina occidental y ha sido parte de nuestras tradiciones culinarias durante siglos. Según la Enciclopedia Gastronómica Larousse, el origen del puré de papa se remonta a América del Sur, específicamente a los Andes, donde las papas fueron cultivadas por primera vez hace miles de años.

Los nativos andinos descubrieron las papas y reconocieron su valor como alimento básico. Las cocinaban de diversas formas, incluyendo las papas cocidas y machacadas para formar una especie de puré. Este método de preparación permitía aprovechar al máximo las papas y hacerlas más fáciles de digerir.

El puré de papa llegó a Europa en el siglo XVI, cuando los exploradores españoles llevaron las papas desde América al Viejo Continente. Al principio, las papas fueron recibidas con escepticismo y se consideraron solo alimento para animales. Sin embargo, gradualmente se empezaron a apreciar sus beneficios y se incorporaron a la dieta de la población europea.

En el siglo XVIII, el puré de papa se convirtió en un plato popular entre la aristocracia francesa. Fue el famoso chef francés Antoine-Augustin Parmentier quien contribuyó en gran medida a la popularización de este delicioso plato. Parmentier experimentó con diferentes recetas de puré de papa y las sirvió en la mesa del rey Luis XVI, y logró así que se volviera una opción elegante y sofisticada.

Tips para hacer puré de papa cremoso

1. Elige las papas adecuadas: Para obtener un puré de papa cremoso, es importante seleccionar las papas correctas. Las papas de variedades como Yukon Gold o Russet son ideales debido a su contenido de almidón y textura suave.
2. Cocina las papas correctamente: Lava y pela las papas antes de cortarlas en trozos uniformes. Cocínalas en agua con sal hasta que estén tiernas, pero evita sobrecocinarlas, ya que absorberán demasiada agua y el puré puede volverse acuoso.
3. Utiliza mantequilla y leche caliente: Agrega mantequilla y leche caliente a las papas cocidas. La mantequilla aportará cremosidad y sabor, mientras que la leche ayudará a suavizar la consistencia del puré. Añade estos ingredientes gradualmente mientras machacas las papas hasta obtener la textura deseada.
4. No olvides sazonar: El puré de papa puede ser bastante insípido si no se sazona adecuadamente. Agrega sal y pimienta al gusto, y considera añadir otros condimentos como ajo en polvo, cebolla en polvo o nuez moscada para realzar el sabor.
5. Si deseas llevar tu puré de papa cremoso al siguiente nivel, puedes probar algunas técnicas adicionales. Por ejemplo, puedes pasar las papas por un colador o utilizar una batidora de mano para obtener una textura más suave y libre de grumos.

Cómo hacer puré de papa casero, tan cremoso que se deshace en la boca

Ingredientes:

• 2 papas blancas de cáscara rosada
• 50 g de mantequilla sin sal
• Sal de mar al gusto
• 100 ml de leche entera
• Pimienta negra al gusto

Procedimiento:

1. Corta las papas sin pelar en trozos grandes, asegurándote de que tengan aproximadamente el mismo tamaño. La variedad de papa blanca de cáscara rosa es ideal, ya que absorbe menos agua y dará un puré más delicioso.
2. En una olla grande, hierve agua con sal a fuego medio y cocina las papas durante 15 a 20 minutos, o hasta que estén tiernas. Es importante utilizar agua fría al principio para evitar que los almidones se desprendan.
3. Escurre las papas en un colador y deja que se sequen al vapor durante unos minutos. Luego, vuelve a colocar las papas en la olla y tritúralas bien con un machacador de papas manual para obtener una mejor textura sin perder propiedades de la papa.
4. Cuando las papas estén casi suaves, agrega la mitad de la mantequilla, la leche y una pizca de sal marina y pimienta negra. Continúa machacando hasta que quede suave y añade más leche si es necesario para obtener la consistencia deseada. Ajusta el condimento según tu gusto.
5. Vierte el puré de papa en un tazón para servir, y esparce el resto de la mantequilla por encima para darle un toque extra de sabor.
6. Para un toque final, puedes decorar el puré alisando los bordes con una espátula, creando una punta cónica en el centro.

¡Disfruta de este cremoso y delicioso puré de papa como guarnición o plato principal! Si te gustó esta receta, no olvides suscribirte a nuestro canal de YouTube. Cada semana tenemos una receta nueva para ti.