La mantequilla es uno de los ingredientes más preciados de la gastronomía. Lo utilizamos para muchas cosas: para sazonar, para masas, para postres y para decorar pasteles. Comúnmente la compramos en el supermercado o tienda de abarrotes, pero en realidad es muy sencillo hacerla en casa. Puedes ahorrarte algunos pesos al prepararla y obtener suero de leche que es ideal para hacer unos hot cakes súper esponjosos.
Tiempo total: 15 minutos
Porciones: un tazón o recipiente pequeño
Ingredientes
2 tazas de crema para batir de tu preferencia
1 cucharadita de sal (opcional)
Utensilios
Batidora
Preparación:
En una batidora mediana, bate la crema para batir a velocidad media por 10-12 minutos, hasta que veas que la textura se empieza a espesar.
Con una manta de cielo, transfiere la mezcla sólida y exprime sobre un tazón. El líquido que suelte es conocido como suero de leche o buttermilk.
Nota: si no tienes manta de cielo, exprime sobre un colador.
Transfiere la mantequilla previamente exprimida a una tabla y con ayuda de una regla limpia forma un rectángulo. Si no tienes una regla, puedes guardar en un tazón o frasco.
Seguramente haz visto en restaurantes y cafeterías que ofrecen mantequilla de sabores como: romero, chile, café o con mermelada. En realidad es muy sencillo hacer este proceso.
Una vez que la mantequilla sea exprimida en la manta de cielo, el siguiente paso es colocar la mezcla en un tazón y mezclar con los ingredientes de tu preferencia.
Aquí algunas opciones para tunear tu mantequilla:
Ahora ya tienes todo lo necesario para hacer una buena mantequilla casera y darle un giro inesperado a tus creaciones.
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