La entraña es el corte de la parte interna de los costillares, específicamente el músculo del diafragma. Puede ser de res o ternera, siendo esta última la más suave.
Su relación calidad precio es excepcional aunque es un corte escaso, ya que sólo se pueden retirar dos piezas de cada animal, algo que hace que sea complicado encontrarla.
La entraña viene cubierta por una membrana por ambas partes que se tiene que retirar a la hora de cocinarla.
Su apariencia es la de una tira de carne ligeramente más oscura que el resto de piezas y con un sabor sabroso e intenso y gran jugosidad, ideal para comerla en los primeros términos de cocción.
Puedes acompañar tu corte de entraña con puré de papa, verduras a la parrilla, ensalada, papas a la francesa, o una pasta que no sea cremosa.
Y como no hay nada más delicioso que maridar un excelente corte de carne con una buena copa de vino, un Cabernet Sauvignon es el vino ideal para armonizar con los cortes grasos, como el bife de chorizo o la entraña.
Un Cabernet Sauvignon contiene más taninos y crianza en madera, responsables de “limpiar” la sensación grasa del paladar.
La entraña se debe de comer sellada o término medio, ya que si se cocina demasiado, puede llegar a endurecerse. Si eres de los que prefiere la carne tres cuartos o término medio, te recomendamos otras piezas como el entrecot de ternera.