¡No, no es textual! El caldo de oso es una botana tradicional de León, Guanajuato. Hablamos de una combinación de frutas, jícama y pepino que se puede encontrar en los puestos callejeros de esta ciudad.
Cuenta la historia que un hombre apodado “El Oso” pedía en los años 50 un coctel de frutas hecho con jícama, pepino, vinagre de piña, limón, sal, chile en polvo y queso fresco.
Al ver cómo lo disfrutaba, muchas personas comenzaron a pedirlo como “el caldo del Oso” y al poco tiempo se volvió una botana tradicional y famosa en León, Guanajuato.
La combinación de los ingredientes podría parecer un poco extraña; sin embargo, todo junto resulta ser un gran acierto. El vinagre de piña y el queso fresco ayuda a balancear los sabores.
Además de la botana, existe una sopa que lleva el mismo nombre; es originaria de Chihuahua, principalmente del Río Conchos.
Los trabajadores de la presa La Boquilla, en Camargo, preparaban un caldo con el pescado que obtenían de este lugar. Se hizo tan común en sus días que ellos mismos comenzaron a llamarlo “caldo odioso” hasta que el juego de palabras terminó por llamarlo “caldo de oso”.
En Sinaloa por ejemplo, existe un caldo de camarón elaborado con jitomate, chile serrano, cebolla, orégano, pimienta, sal y ajo que lleva el mismo nombre.
¡A disfrutar de esta gran botana tradicional de León, Guanajuato!