Todos los países tienen su comida tradicional callejera, así como en México podemos encontrar tortas en cualquier esquina, en Italia pasa lo mismo con la porchetta.
Lo suave de la carne y la piel crujiente, sumado a las especias y hierbas con las que se prepara lo hacen un manjar digno de una tarde en casa.
Una de las formas más comunes de encontrarla es en panino, es decir, en rebanadas y dentro de una chapata. Para complementar sus sabores se puede añadir pesto.
Hay distintos platillos alrededor del mundo con los que varias comunidades o regiones se disputan su creación y con la porchetta sucede esto.
Mientras que los habitantes de Ariccia defienden su autoría, los habitantes de Lazio hacen lo propio. Lo cierto es que no importa quien haya sido, sin duda agradecemos este plato generoso.
Se trata de un corte de cerdo sin huesos -generalmente la panceta- que se prepara aromatizando con hierbas como romero e hinojo. Hay algunas recetas que incluyen un relleno del mismo cerdo, ¡Sí, con sus propios embutidos!
Estas variaciones dependen de la región en la que se prepare y suman grandes características a su sabor. Como en Italia tienen una gran tradición panadera, no es raro encontrar paninos de porchetta con pan estilo chapata recién horneado que complementa la experiencia.
Para acompañar es común que te preparen un par de bolitas llamadas supplis que están hechas de arroz con salsa pomodoro y algún queso italiano en el centro. Estos aperitivos se fríen y así como tu panino de porchetta también los puedes comer con la mano.
En la CDMX por fortuna hay expertos en porchetta, se trata de Porkit que se apegan a la receta original y además tienen envíos a domicilio.
El cuidado de la carne para ellos es fundamental así que llega empacada al vacío para terminar de cocinarla ya sea en horno, sartén y hasta baño María.
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Si quieres prepararla en casa como si estuvieras en Italia es importante que obtengas el corte correcto de cerdo que es la panceta.
También considera que debes limpiar bien la carne por ambos lados.
Un ingrediente indispensable es la paciencia ya que para que quede perfectamente bien cocida deberán pasar al menos tres horas. No te desesperes.