Las cáscaras de las frutas y verduras también se pueden aprovechar. Es muy común que se desechen; sin embargo, te sorprenderá cómo es que puedes utilizar cada parte de estas. Te damos algunos tips buenazos.
La cáscara de este cítrico es perfecta para limpiar y darle brillo a las cacerolas.
También se puede utilizar para quitar los malos olores del refrigerador: pon un poco de sal sobre estas y colócalas en puntos estratégicos de tu refrigerador.
Muchas personas la ocupan para elaborar esencias, perfumes y repelentes. Si te gusta la repostería puedes molerla quitando la parte blanca y hacer harina para utilizarla posteriormente en alguno de tus postres.
También puedes confitarla y haccer mermeladas y conservas con ella ¡quedan deliciosas!
Una de las tantas maneras de aprovecharla es para darle brillo a las hojas de las plantas, también puedes crear composta e ir depositando todos los residuos orgánicos en ella.
Funciona también si quieres ablandar carne, solo debes poner la cáscara arriba de la proteína mientras se cuece, esta absorberá los aceites y grasas.
También funciona para quitar moretones, humectar la piel y tratar el acné; basta con que pases la parte central de la cáscara por tu piel para después enjugar con agua tibia.
Al igual que la naranja, el limón tiene propiedades antibacterianas que ayudan a disminuir los malos olores, puedes hervir las cáscaras con un poco de romero y reservar para tener un aromatizante completamente natural.
También ayuda a blanquear uñas y como tónico para la piel.
La cáscara funciona como antioxidante gracias a su alto contenido en vitaminas A y C estas ayudan a combatir los radicales libres; una forma de utilizarla es triturándola hasta crear una pasta para después aplicarla en el rostro de manera uniforme.
Otra forma de ocuparla es preparando sopas, smoothies o aguas frescas que la incluyan.
Es perfecta para generar colágeno en la piel, también ayuda a promover el crecimiento celular, lo único que debes hacer es hacer un facial o tónico con la cáscara.
Para hacerlo deberás hervir la cáscara y reservar el agua, para después colocar en un atomizador. Otra forma de utilizarla es a través de infusiones, hiérvela y reserva.
Un estudio realizado por el Instituto Politécnico Nacional confirmó que además de ser bactericida y antioxidante, la cáscara de mango ayuda a combatir cicatrices; se recomienda utilizarla para agilizar el proceso de regeneración celular.
Además, tiene un alto contenido en polifenoles los cuales son aprovechados para la acuacultura.
Ahora sí podrás aprovechar las cáscaras de frutas y verduras.