La industria de las bebidas alcohólicas es enorme y para ser sinceros es un gran placer consumirla pero no se salva de aquellos que buscan hacer trampa, como quienes producen whisky falso. ¿Quééééée?
Así es. Elaborar esta bebida es todo un arte, se necesitan conocimientos químicos, biológicos y tener los sentidos a flor de piel. Esta preparación compleja ha valido falsificaciones; de hecho, al ser un negocio desleal muy común dio pie a que se generaran estrategias y estudios para reconocer los verdaderos.
No es para menos la preocupación de verificar su autenticidad tomando en cuenta que es un producto tan preciado que hubo quien pagó más de 35 millones de pesos por una botella. Sí, fue un récord mundial y ocurrió en Londres en el 2018.
Aquí van tres formas que existen para identificar un whisky falso, el cual se caracteriza por estar adulterado con agua, etanol barato o colorante caramelo. Otra forma es mentir en el año de producción o el tiempo de añejamiento en barrica.
Aquí va una anécdota triste. En 2017, un hombre de origen chino entró a un famoso hotel en Suiza y observó una botella de Macallan del año 1878, una de las marcas más apreciadas en el mundo del whisky. Insistió tanto para probarla que le sirvieron dos centilitros por un precio mayor a los 200 mil pesos.
Meses más tarde descubrieron que esa reliquia que cuidaban como un tesoro ¡no era original!
Como esa hay varias historias, por lo que la Universidad de Glasgow, en Escocia, tomó el asunto en sus manos para identificar whisky falso. Descubrieron que un elemento detectaba estos fraudes químicamente, el carbono 14.
De esta manera se comprobó verdadero valor de la botella de Macallan, es tan efectivo que pudieron darse cuenta de que ese whisky no había sido fabricado en 1878, sino entre los años 2007 y 2014.
Han sido tantos los esfuerzos por detener esta situación que la tecnología también ha jugado a favor.
Ingenieros y químicos de las universidades escocesas de Glasgow y Strathclyde crearon un catador hecho con oro y aluminio que identifica las diferencias entre bebidas alcohólicas.
Esta lengua artificial tiene “papilas gustativas” 500 veces más pequeñas que las de los humanos por lo que distingue detalles más rápida y precisamente. Es tan avanzada que puede detectar incluso diferencias entre la misma marca pero envejecida en distintos barriles, también entre variedades de añejamiento por edad.
Si bien no es portable, es decir, no la puedes sacar de tu bolso para probar cada vaso de whisky que tomarás, es de gran utilidad para identificarlos en laboratorio y no solo este líquido, sino cualquier otro.
Brasil y Estados Unidos unieron fuerzas entre la Universidad Federal de Goiás (Brasil), la Colorado State University (Estados Unidos) y hasta la policía federal de Brasil. Esto con la finalidad de crear un método de identificación de whisky falso mucho más barato y accesible.
Se trata de tiras colorimétricas similares a las que se utilizan en la detección de drogas y están basadas en la detección principalmente de sacarosa.
Como dato, el agua para la producción de whisky es tan valorada que las empresas que lo producen normalmente están cerca de fuentes acuíferas puras; sin embargo, cuando se adultera y diluye añadiendo más, utilizan generalmente de la llave o no purificada así que contiene restos de cloro y flúor.
Estos elementos también los detectan dichas tiras que, por cierto, tienen un precio promedio de dos centavos de dólar y tardan 2 minutos aproximadamente en dar el resultado.
Y tú ¿estás seguro que tu whisky no es falso?