Vida Bebida es un proyecto que se dedica a la elaboración de kombucha artesanal, un probiótico hecho a base de té verde y negro. ¿Qué? ¡Sí! Aunque no lo creas tiene más beneficios de los que crees.
Similar al pulque, la cerveza y el vino, esta bebida ancestral japonesa se suma a la lista de fermentados que favorecen al cultivo de la flora intestinal y que han resultado maravillosos para más de un aspecto de la salud.
A la kombucha además de agua, té y azúcar, se le agrega un cultivo de bacterias y levaduras llamado SCOBY, el cual son responsables de la pureza y calidad del resultado final.
Inició hace un año y medio como un proyecto de tres socios, una de ellos, Bertha Dueck, quien sufrió por ocho años problemas digestivos.
Después de intervenciones con especialistas y por fin encontrar un medicamento que ayudara a erradicar el problema, Bertha se mudó al extranjero y ahí no encontró la medicina que meses atrás le habían recetado; por este motivo, tuvo que buscar una alternativa que la auxiliara a controlar su problema.
Probó una gran cantidad de tés y soluciones naturales hasta que llegó a la kombucha, esta bebida ayudó a que su flora intestinal mejorara, por lo que decidió tomar un curso para elaborarla ella misma.
“Comencé tomando kombucha comercial, luego comencé a prepararla en mi casa y me empecé a sentir muy bien, dejé de tomar medicinas por completo.”
Tras su regreso a la CDMX, Bertha compró los insumos que necesitaba para seguir preparando su propia kombucha. “Me traje mi propio SCOBY y empecé a hacerla de cero aquí”. Empezó a venderla a su familia y amigos cercanos, tras ver la demanda comenzó a distribuirla a más gente.
El proceso que se utiliza para realizar la kombucha es completamente artesanal, por lo que muchas veces es difícil mantener un producto uniforme; varía un poco en cuanto al sabor, la textura, el gas y el aroma ya que es una bebida que tiene vida propia y constantemente está evolucionando.
“Nosotros usamos té verde y negro orgánico ya que tienen muchas propiedades, agregamos azúcar de caña y lo ponemos a fermentar en tanques de 150 litros junto con el SCOBY.”
La importancia de la caña de azúcar es fundamental para la elaboración de la kombucha ya que las bacterias y levaduras se alimentan de ella, esto hace que el proceso de reproducción de los probióticos suceda conforme a la naturaleza y sin contaminarse.
Tarda de 4 a 14 días en la primera fermentación y Bertha le atribuye características específicas acorde al ciclo lunar.
“A partir del día 4 nosotros comenzamos a medir pH, contenido de bacterias y azúcar para ver cuánto tiempo le falta o si ya está lista.”
Algunos de los beneficios de tomar esta bebida son:
Vida Bebida Kombucha tiene 5 sabores: original, jengibre cítrico, moras silvestres, jamaica y mate energy. Cada una de ellos contiene elementos adicionales que contribuyen a mejorar otros aspectos del cuerpo humano.
Existen 3 presentaciones de kombucha: para los novatos está la de 355 ml, para los más experimentados la de 500 ml y para los kombucheros de corazón existen bidones de 3 litros.
Por si fuera poco, este proyecto es cuidadoso con el medio ambiente, ya que su etiquetado está hecho especialmente para que se pueda volver a utilizar.
Además tienen un programa de reciclaje con algunas tiendas gourmet donde los clientes pueden llevar sus botellas; después de 12 se les da una kombucha de regalo.
“La idea es usar los mínimos recursos que se puedan y aportar valor a la sociedad”.
¿Quieres pedir tu kombucha? Hazlo aquí.
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