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Se usa en los cocteles y en la cocina, pero ¿qué es un licor?

Por Animal Gourmet

Aunque se dice que su uso se popularizó en la Edad Media, desde la época antigua ya existen registros de una bebida que causaba gran controversia: el licor. 

No es raro escuchar que se le diga así a las bebidas alcohólicas, de hecho, el licor en sí mismo es una y tiene tantos usos que ha llegado hasta la cocina.

¿Destilado o licor?

Hablar de licores es hablar de un tema amplio, tan grande como la cantidad de flores, frutas, maderas o hierbas con las que se preparan. Hay algunos que han cruzado la barrera del tiempo -como el anís- y hoy en día siguen vigentes.

Primero vamos a su elaboración. Todos los licores se hacen mediante destilación; esto es similar a infusionar ciertos ingredientes ya sea en agua o en alcohol, pero posteriormente se exponen al calor para concentrar los sabores.

Si la palabra destilar te es conocida es porque así se elaboran algunas bebidas insignia en México como el mezcal o el tequila. Sí, pasan por todo un proceso largo hasta convertirse en ese líquido que tomamos con entusiasmo. 

Hay distintas formas de dar sabor y aroma a un licor. La primera consiste en destilar todos los ingredientes al mismo tiempo, añadiendo también el endulzante y colorante si es necesario. Así, ya que termina este proceso está listo para consumir.

Otra forma es tener un destilado base, por ejemplo, un whisky, que es el resultado de malta fermentada de cereales como maíz y expuesto al calor. 

A esta bebida se le agregan hierbas o frutas y se infusionan para dar un toque completamente distinto. Esta segunda forma de obtener un licor conserva mejor el brillo, la frescura y en general las características organolépticas del ingrediente que se haya sumado.

No existe un solo tipo de licor. Están los elaborados a partir de una sola fruta o hierba que se conocen como simples y los que surgen de la mezcla de ambas que son conocidos como mixtos.

Su graduación alcohólica varía dependiendo el ingrediente y el proceso de destilación, pero van de 27 a 55 grados. 

Para quienes cuidan todas las calorías que consumen, 100 mililitros de licor a 27° de volumen alcohólico suman unas 300 kcal, mientras que uno con una graduación de 40° puede tener casi 500 kcal por la misma cantidad.

¿Cuáles hay?

No podemos negar que hay licores que se encuentran en nuestros consentidos, sin embargo, la curiosidad no para. Antes, incluso se les conocía como alquimistas a las personas que combinaban elementos para crearlos. 

En México no falta quienes experimentan combinaciones de ingredientes para un licor y las incluyen en sus bebidas; tal es el caso de Dani Tatarin y Osvaldo Vázquez en Baja California Sur o de Israel Díaz en Nayarit. Los tres han hecho tal cantidad de licores e infusiones que crean cocteles básicamente desde cero.

Uno de los más conocidos es la absenta, también conocido como el hada verde, que es una mezcla de hierbas con el ajenjo como protagonista y tiene una alta graduación alcohólica; puede alcanzar hasta un 70%. Se dice que fue fundamental en la creación de la obra de artistas como Van Gogh, Edgar Allan Poe y Picasso.

Por otro lado está el fernet que también es un licor de hierbas como mirra, ruibarbo, manzanilla, orégano y azafrán; se maceran en alcohol de vino y posteriormente duran hasta doce meses en barricas de roble.

¿Cuál licor es tu favorito?