Tener una buena bola de helado hecho en casa puede llegar a ser muy reconfortante, ¿a quién no lo ha acompañado ese bote sacado del congelador para superar los malos ratos? Imagínate tener esa posibilidad al alcance de tus habilidades.
Es momento de que aprendas a hacerlo por tu cuenta y aproveches el tiempo libre, además es fácil y más económico de lo que te imaginas.
Entre los beneficios de preparar helado en casa está uno muy importante: tú controlas los ingredientes. Siendo sinceros, esta no es una receta de bajas calorías y te dará todo el apapacho que necesitas, con la ventaja de que no tendrá productos sintéticos ni químicos innecesarios.
Si te preguntas cómo es que vas a lograr que al meter la base de helado a congelar no se forme un cubo de hielo normal, la química de los alimentos jugará a tu favor.
El secreto está en saber manipular el líquido de la preparación e incluir aire, azúcar, proteínas y grasa; esto también ayuda a que quede cremoso.
Lo mejor de estas recetas es que no necesitas esa famosa máquina de helados aunque sí vas a tener que estar al pendiente y mover una que otra vez tu mezcla para que no se cristalice.
Preparación
Una vez que ya tienes la base le puedes agregar cualquier sabor que quieras ya sea frutal, de galletas y hasta queso. Cuando mezcles los ingredientes es importante que lo hagas de forma suave para que el aire de la base escape lo menos posible.
Ya que tengas tu helado de sabor cubre con plástico delgado y que toque toda tu preparación con la intención de que no se haga una capa dura encima, quede cremoso y fácil de manejar. Congela mínimo 6 horas y ¡listo!
Galletas oreo: Mezcla en el procesador o en licuadora 8 galletas con todo y relleno hasta que quede una especie de pasta. Integra en la base con movimientos envolventes y suaves.
Frutas: Agrega en la licuadora ¼ de taza de leche con la fruta de tu preferencia, ya sea mango, plátano, fresa o lo que se te antoje y muele con cuidado de que quede más pasta que líquido.
Queso con zarzamora: Coloca en la licuadora ⅔ de barra de queso crema y tres cucharadas de mermelada de zarzamora hasta que quede mezclado e integra a la base.
Vainilla: Este helado puede ser el perfecto acompañante para tu café y preparar en casa un affogato. Lo único que debes hacer es integrar más vainilla, si es posible de vaina natural y es todo.