Recientemente, el aceite de canola se ganó su lugar en las cocinas de todo el mundo debido a que es considerado de los más saludables. Además de ser útil para preparar el delicioso arroz con cúrcuma y jengibre que se antoja para comer hoy, se puede emplear en prácticamente todo.

Este aceite vegetal fue desarrollado en los años 70 por investigadores universitarios y el sector agrícola de Canadá. Ellos utilizaron técnicas tradicionales de mejoramiento de plantas.

El libro Cuida tu corazón. Saludables recetas con aceite de canola, editado por Larousse Cocina, dice que en términos nutrimentales, este es el mejor que existe en el mercado pues proporciona más grasas saludables que cualquier otro.

Por otro lado, tiene propiedades organolépticas que permiten utilizarlo tanto en preparaciones saladas como dulces, resaltando las cualidades naturales de los ingredientes; además, su alto punto de humo hace que pueda ser utilizado en diversos métodos de cocción de forma segura.

A continuación te compartimos una de las recetas que puedes encontrar en este libro.

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El arroz es el típico ingrediente que nunca falta en las alacenas y que es nutritivo, económico y rico. Por su parte, la cúrcuma y el jengibre son dos especias con una gran cantidad de beneficios para el sistema cardiovascular e inmunológico.

Arroz con cúrcuma y jengibre

La cúrcuma y el jengibre aportan a este platillo un color y sabor vibrantes que se potencian con ralladura de limón amarillo, la cual provee un perfumado y dulce aroma.

Ambas especias tienen propiedades antimicrobianas, antioxidantes y antiinflamatorias. La alta tolerancia al calor del acei­te de canola es ideal para sofreír el arroz; además, su sabor suave y sutil no interfiere con el del resto de los componentes del platillo.

Ingredientes (para 8 porciones)

• 2 tazas de arroz
• 2 cucharadas de aceite de canola
• 1 litro de agua
• 1 cucharadita de ajo picado finamente
• 2 cucharadas de cebolla picada
• 1 cucharada de cúrcuma en polvo
• 2 cucharadas de jengibre fresco rallado
• ½ cucharadita de sal
• 1 taza de col rizada o kale fileteada
• 1 cucharadita de ralladura de limón amarillo

Procedimiento

1. Colocar en un recipiente el arroz y enjuagar con suficien­te agua varias veces hasta que ésta tenga un color translú­cido. Sumergir el arroz en suficiente agua limpia y dejar que se remoje durante 30 minutos; escurrir y reservar.
2. Poner sobre el fuego una cacerola con el aceite de cano­la; cuando se caliente, freír el arroz, moviéndolo ocasional­mente durante un par de minutos o hasta que se dore ligeramente.
3. Verter el litro de agua sobre el arroz y agregar el ajo, la ce­bolla, la cúrcuma en polvo, el jengibre rallado, la sal y la col rizada o kale; mezcle bien.
4. Cuando la preparación hierva, bajar el fuego al mínimo y tapar la cacerola. Dejar que el arroz se cueza entre 16 y 18 minutos o hasta que haya absorbi­do todo el líquido.
5. Retirar del fuego y dejar reposar duran­te 3 minutos.
6. Servir el arroz espolvoreado con la ralladura de limón.