Si tienes la intención de estrenar esos sartenes o echarle ganas a tu comida, te darás cuenta de la importancia que tiene mantener cada cosa en su lugar. Organizar tu cocina es una ventaja que hará toda la diferencia en la experiencia de preparar tus alimentos.

Para que sea una tarea agradable, la zona de preparación requiere un espacio simple, cómodo y organizado. Entre más despejada esté de cosas que no se necesitan, será más fácil.

¿Por dónde empezar? 

Tal vez estés por mudarte o quizás te interesa organizar tu cocina. Hay tips infalibles que te ayudarán a tener una mejor relación con ella e incluso amar preparar tus alimentos si todavía no lo haces.

Mantén tus alimentos frescos en buenas condiciones 

Los alimentos frescos nunca deben faltar en tu cocina. Si los utilizas con frecuencia lo mejor será que tengas un lugar donde éstos puedan estar ventilados y alejados de las zonas con más calor y humedad.

Hay algunos que van en el refrigerador, otros más que les va mejor la obscuridad y la temperatura ambiente.

Invierte en un frutero lo suficientemente grande como para poder colocar ahí varias cosas. Un truco infalible es comprar una malla que lo cubra para evitar las desagradables mosquitas.

Contenedor espacioso

Seguramente en alguna parte de tu cocina hay un espacio que puedes utilizar como alacena, en caso de que no y de que tengas un huequito por ahí escondido en tu casa puedes adaptarlo. Administra las puertitas del mueble y coloca en ellas los ingredientes conforme a su uso.

Lo más lejano de tu área de trabajo debe ser lo que menos ocupas; aquí podemos hablar de latas de leche condensada, especias raras, cocoa, harina o conservas.

Recomendamos que tenga estantes de diferentes alturas para que los artículos situados en el fondo no caigan en el olvido.

Cerca de la estufa ten una pequeña estación con los básicos que se utilizan siempre: aceite, vinagre, sal y pimienta.

Los frascos de vidrio son una excelente opción para mantener frescos los alimentos de la alacena, además, le dan un toque muy lucidor y bonito. Invierte en unos herméticos y de tamaño suficiene.

Juntos pero no revueltos

Agrupa los ingredientes que tienen la misma función; por ejemplo, guarda las especias, los condimentos y las hierbas aromáticas juntos. No olvides que van en un lugar obscuro y deben estar bien cerrados para que duren más tiempo.

El grupo de ingredientes secos (harinas, azúcar, cocoa, café) sácalos de su bolsa y guárdalos en un recipiente hermético para que no se hagan viejos.

Haz  etiquetas con el nombre de cada cosa detro de su recipiente. Así tendrás perfectamente todo ordenado y en su lugar.

Empaques cerrados en el refri

El refri es fundamental dentro de una cocina, ayuda a mantener y conservar los alimentos; sin embargo hay alimentos que absorben fácilmente el aroma a humedad y puede ser francamente desagradable.

Lo que te recomendamos es que siempre que refrigeres algo lo empaques de modo que el ambiente no penetre en el alimento. Si tienes olores desagradables, siempre puedes recurrir al bien amado bicarbonato para desaparecerlo.

En el caso del congelador, es muy importante guardar todo absolutamente cerrado porque el frío directo quema los alimentos.

Electrodomésticos al alcance

¿Qué utilizas más en tu rutina diaria? Sí, aunque esa batidora te haya costado las perlas de la Virgen, quizás no es tan buena idea tenerla fuera todo el tiempo. Designa un lugar para ella cuando la vayas a usar y mientras tanto guárdala donde no estorbe.

Al contrario, la licuadora, cafetera o procesador de alimentos son algo que sí te recomendamos tener a la mano para todos los días. Verás que es un gran factor al organizar tu cocina y distribuir el espacio.

Separación de basura

Es indispensable aprender a separar la basura después de cocinar. Lo más fácil es tener un bote que tenga una separación de orgánica e inorgánica.

Incluso puedes buscar alternativas para cocinar con lo que te sobra. Checa de qué va el trash cooking.

Almacena tus utensilios 

Almacenar de una forma la cristalería, la vajilla y los artículos de cocina depende de una una buena organización, los artículos de uso frecuente deben colocarse a la mano.

Lo más fácil será que los coloques cerca de tu fregadero, así evitarás estarte desplazando y organizar tu cocina mejor.