La región oeste de Estados Unidos es una gran productora de vid que silenciosamente se han ganado el corazón de todos; con una calidad similar a los de California, los vinos de Oregón brillan por ricos y accesibles.
Así como hay regiones en Francia, Italia, Australia, Chile, Argentina y México que conjuntan las características necesarias para producir vides de calidad, en el país del norte no han desaprovechado ni un centímetro de la tierra que baña la zona del Pacífico.
Europa Mediterránea y Asia central tienen los primeros registros de este fruto, sin embargo, los aventureros lograron identificar zonas en el mundo donde es factible su crecimiento, uno de estos lugares es Oregón.
El origen de los vinos de Oregón
Formar expectativas y que a partir de ellas se logre experimentar puede tener dos resultados: éxito y fracaso. Los vinos de Oregón son sin duda un éxito rotundo y un ejemplo de experimentación bien lograda.
En Estados Unidos los climas fríos benefician este cultivo. Prácticamente en todos sus estados es posible la siembra de vides y producción de vino, sin embargo, no podemos negar que California lidera el mercado. Washington, Nueva York y Oregón siguen en la lista y a nivel mundial este país es el cuarto productor.
La historia del inicio de producción comienza con la Colonia, cuando los franceses pusieron entre sus prioridades la vinicultura.
Los vinos de Oregón tienen relativamente menos tiempo de existir, no fue sino hasta 1847 que la primera bodega llegó al estado. A pesar de esto, fue hasta la década de los sesenta que las bases para la producción quedaron bien definidas.
Para el año 2000 ya se podían contar alrededor de 140 vinícolas, 20 años después ya hay más de 700 y el número sigue en aumento.
En 1965, el primer plantío de Pinot Noir vio la luz gracias a estudiantes de la Universidad de Davis -que sí está en California-. Sus resultados fueron tan favorables que para la década de los 70 los productores ya protegían la calidad y establecían normas para su etiquetado.
En 1979 una prueba de fuego fue superada al quedar entre los 10 primeros lugares del concurso internacional de vinos Wine Olympics que se celebró en París. Su calidad comenzaba a posicionarlos ante el mundo.
De suelo y varietales
Los productores de vinos de Oregón permitieron a la naturaleza elegir, primero estudiaron la tierra para saber cuáles eran las varietales que mejor se adaptaban, al contrario de elegir primero la cepa.
Este estado tiene 18 regiones productoras también conocidas como Área Vitivinícola Americana (American Viticultural Area- AVA) y una buena noticia es que alrededor del 40% están certificadas como viñedos orgánicos por su compromiso con el medio ambiente.
Los vitivinicultores, enólogos y hasta sommeliers que están involucrados en todo el proceso desde la siembra de la vid hasta el producto final, saben que el suelo y el clima juegan un papel fundamental.
En Oregón el suelo no es plano, tiene colinas que se elevan entre 300 y 400 metros. Esta característica le pone un grado de complejidad al buscar angulaciones que permitan al plantío captar de manera óptima la luz del día.
En la parte del clima tienen un efecto que se llama diferencial térmico que se refiere al frío que hay la mayoría del año excepto en verano en donde de día hace bastante calor y de noche bajan las temperaturas. Justo en esta estación del año las uvas están en plena maduración y la falta de lluvias las favorecen.
Lee:
-10 mitos sobre el vino.
También las fuertes ráfagas de viento provenientes del Pacífico hacen su trabajo, llevando a la uva a formar un piel más gruesa que deriva en sabores más complejos en el resultado final.
Podemos decir que la Pinot Noir es la especie que representa a los vinos de Oregón y es apeoximadamente el 64% del total de vid sembrada. También hay Chardonnay, Riesling, Cabernet Sauvignon, Syrah y Pinot Gris que es una cepa de uva color azul-grisáseo que se utiliza específicamente para hacer vino blanco.
El sabor de estos vinos es elegante, con aroma floral y frutal y una acidez media alta. Por la calidad de la uva la barrica no toma protagonismo, más bien buscan un equilibrio entre fruta y madera en donde se busca un respeto a la vid resaltando su sabor.
En México poco a poco llegan los vinos de estas bodegas, por su calidad hay algunos que alcanzan precios bastante altos. Los productores confían en que entre más se conozcan puedan ser más accesibles, sin embargo, saben bien la calidad que exportan.
Si tienes oportunidad de visitar Oregón busca todas las actividades que se pueden realizar alrededor de esta gran aventura vitivinícola.
