Sopas mexicanas: cómo preparar caldo tlalpeño y sopa tarasca
Por Paloma García Castillejos
No hay comida completa sin un plato humeante y lleno de sabor. Preparar caldo tlalpeño o una buena sopa tarasca va a darnos ese apapacho que necesitamos durante la temporada de frío o lluvias.
Si hay algo que tienen todas las sopas mexicanas es que bien pueden ser una comida completa y dejarte más que satisfecho. Así pasa con el pozole, el mole de olla, el caldo de pollo y estas recetas que tenemos para ti.
Esta receta es una de las más tradicionales y sencillas de la cocina mexicana; está presente en casi todos los menús y fonditas. ¿El secreto? La sazón.
Su historia es incierta, hay quienes dicen que se inventó en Talpa, Jalisco; otros más lo llevan al otro extremo de México hasta Xalapa, Veracruz. Los chilangos preferimos pensar que es en honor a Tlalpan, una de las zonas más bonitas de la ciudad.
Ingredientes (4 porciones)
3 jitomates maduros
2 chiles chipotle ahumados
1/4 cebolla picada
1 diente de ajo picado
1 cucharada de aceite de oliva
2 tazas de ejotes en trozos
1 taza de calabacitas picadas
2 zanahorias en rodajas
1 litro de caldo de pollo
4 pechugas de pollo deshebrada
½ taza de arroz
½ taza de garbanzos cocidos
Para servir
Jugo de limón
Cebolla picada
Cilantro picado
Chile serrano picado
Aguacate en rebanadas
Preparación:
Licuar los jitomates, chipotles, cebolla y ajo.
En una cacerola grande, calentar aceite a fuego alto y sofreir la salsa.
Añadir los ejotes, zanahoria y calabacitas y dejar cocinar por 5 minutos. Incorporar el caldo y las pechugas de pollo deshebradas.
Dejar cocinar por 15 minutos.
Agregar los garbanzos y el arroz. Dejar cocinar otros 5 minutos.
Servir el caldo tlalpeño con limón, cebolla, cilantro, chile serrano y aguacate al gusto.
Sopa tarasca: frijolito y tortilla
La idea es genial: una comida completa preparada con caldito de frijol negro y tortillas fritas. Es un emblema de mestizaje cultural de la región tarasca de Michoacán y es deliciosa cuando hay frío y hambre.
Para coronar, lo mejor será crema ácida, quesito fresco, unas rodajas de chile pasilla y aguacate. ¡Combo completo!
¿Quieres innovar? Agrega fideos en lugar de tortilla.
Ingredientes (4 porciones)
Para el caldo
3 jitomates
Ajo, 1 diente
1 chile ancho desvenado
1 chile guajillo
¼ de cebolla
2 tazas de frijoles negros cocidos
c/s de sal y pimienta
1 litro de caldo de pollo
Para el montaje
Queso fresco rallado
4 tortillas cortadas en juliana
c/s de aceite
1 aguacate laminado o en cubos
Crema ácida
Chile pasilla en rodajas
Procedimiento
Tatemar los jitomates, el ajo y la cebolla en un sartén a fuego alto.
Hidratar los chiles en agua caliente y quitar las venas y las semillas.
Licuar los ingredientes tatemados y los chiles con una taza de caldo de pollo. Sazonar.
Hervir en una cacerola a fuego medio y agregar dos tazas más de caldo.
Colocar los frijoles con el caldo de pollo sobrante en una licuadora, moler e incorporar a la cacerola. Dejar hervir por 10 minutos y sazonar.
En otra sartén, calentar aceite a fuego alto y freír las julianas de tortilla hasta que doren y dejarlas escurrir en papel absorbente. Hacer lo mismo con los aros de chile pasilla (éstos tendrán una fritura mucho más rápida, no dejarlos más de 10 segundos en el aceite)
Servir el caldo en un plato hondo y colocar la juliana de tortilla.
Decorar con queso fresco rallado, crema ácida y chile pasilla.