Muchos de nosotros crecimos en hogares donde el refresco era una tradición a la hora de la comida sin saber que es uno de los productos con más azúcar que podemos ingerir en la vida. Igual que esas, ha muchas bebidas que son menos saludables de lo que crees.
¿Qué pasaría si te dijéramos que la mayor cantidad de azúcar que consumes está en lo que tomas aunque no sea refresco?
En un esfuerzo por mejorar la salud pública, el comercio de bebidas endulzadas y dietéticas se ha limitado; esto ha causado que haya bajado el consumo y la presencia de algunas marcas en espacios que antes eran suyos.
Si esto es así ¿por qué México sigue siendo uno de los países con más obesidad infantil y de adultos en el mundo? Uno de los motivos es que se sustituyeron a los refrescos por otras bebidas ultraprocesadas cuya cantidad de aditivos y endulzantes es igual o incluso mayor.
Hay algo muy poco dulce del azúcar: el hecho de que causa adicción; es por eso que hay una gran variedad de bebidas en el mercado que por más que intentemos no podemos dejar.
Te dejamos otras bebidas con más azúcar de la que creemos. Muchas de ellas las podemos sustituir por las naturales; por ejemplo , cambia los tés embotellados por infusiones naturales.
Algunos jugos también aparecen entre estas bebidas. Ojo, esto no significa que las debas dejar de tomar pero es importante moderar su consumo para no sumar a los factores de riesgo de ciertas enfermedades.
No hay que satanizar el jugo de naranja natural que nos bebemos camino al trabajo o la escuela porque sí, es natural y es una fuente de vitamina C.
Sin embargo, es una bebida que está llena de azúcar -fructosa para ser exactos-; un vaso en promedio tiene 36 gramos de azúcar, es decir, seis cucharadas.
Procura tomarlo con pulpa para no perder la fibra. Otra opción es preparar una infusión con agua y las rodajas de naranja, incluso le puedes agregar limón y toronja para más sabor.
La leche descremada sí reduce la cantidad de calorías que ingerimos pero hay que poner atención a una cosa: su origen.
Cuando consumimos leche orgánica o de vacas de libre pastoreo la leche tiene niveles más altos de omega-3 y CLA (ácido linoleico conjugado); este es un nutriente que aumenta la inmunidad, mejora la masa ósea e incluso ayuda a reducir la grasa corporal.
¿Por qué los jugos prensados en frío son tan apreciados? Es porque este proceso conserva los antioxidantes y micronutrientes delicados y buenos.
Hay algunos de estos jugos que no son tan saludables y nos referimos a los que se encuentran en los estantes del súper. Los vas a reconocer porque vienen empacados en tetra pack o botellas con botón de seguridad.
Para mantenerlos estables se deben agregar conservadores para el sabor que no los hace precisamente saludables. Aditivos, aromatizantes y saborizantes sintéticos son los ingredientes principales.
Otra desventaja es que, ademas del azúcar contenida en las frutas con las que se hacen, se añaden más endulzantes.
Las lechitas eran de nuestras consentidas cuando éramos niños pero en a mayoría de los casos ni siquiera son leche.
El primer ingrediente listado es el agua, seguido por el jarabe de maíz de alta fructosa y luego la proteína de suero de leche.
El resto de la bebida es algo de cacao en polvo, leche en polvo seca, sabores artificiales, sólidos de jarabe de maíz y aceite de palma.
Tan solo el jarabe de maíz puede agregar 19 gramos de azúcar a estas bebidas.
La kombucha es un fermento que está lleno de cultivos probióticos vivos que son beneficiosos para la salud intestinal. Pero si la compras del anaquel y no del refrigerador es una señal de que lo que estás a punto de beber no es precisamente verdadero.
Estas bebidas muchas veces ya están pasteurizadas; se eliminan todas esas bacterias benéficas naturales y luego la diluyen aún más el fermentado agregando agua carbonatada.
¿Quieres tener probióticos naturales? Haz tu propia kombucha o checa la etiqueta del producto.
¿Sabías que los arándanos son las frutas con menor contenido de azúcar? Entonces, ¿cómo puede algo tan bueno volverse malo? Fácil, con conservadores.
Debido a que los arándanos son tan agrios, las compañías que los venden los endulzan; de esta manera una taza de jugo embotellado puede tener hasta 25 gramos de azúcar (entre cuatro y cinco cucharadas)
Jugos embotellados como el de naranja o uva no son jugo; se trata de una mezcla de agua, jarabe de maíz de alta fructosa y algunas gotas de concentrados de estas frutas; aceite de canola y productos químicos.
Ese jugo de tomate que nos encanta agregarle a nuestras cervezas tampoco es tan bueno. Los tomates pueden ser una fruta rica en antioxidantes, pero cualquier beneficio que puedan brindarte se pierde al embotellarse.
De todos los beneficios que puede suponer el beber té, hacerlo con versiones embotelladas o de máquinas en el área de comida rápida es un engaño.
Contienen alginato de propilenglicol, un espesante, estabilizador y emulsionante que puede causar problemas cardiovasculares o neurotóxicos; (no está demasiado lejos del propilenglicol, también conocido como anticongelante para automóviles).
Lo mejor es tomarlo natural y aunque puede llegar a ser algo caro, los sachets son la mejor opción.
La crema de café y el bloqueador solar tienen más en común de lo que podrías pensar. Ambos contienen dióxido de titanio, un bloqueador de radiación ultravioleta que se dobla como agente blanqueador.
Se ha demostrado que el aditivo causa daño al hígado y tejidos en ratones; también puede tener implicaciones para la salud en los seres humanos, según una revisión reciente de la sustancia química.
La crema de café también suele estar salpicada de grasas trans, que a menudo se esconden bajo su nombre menos conocido: mono y diglicéridos.
Si quieres cortar tu café hazlo mejor con leche de vaca.
La verdad es que nos encantan, son dulces y refrescantes, incluso nos ponen de buen humor.
Lo malo de estas bebidas es que para hacerlas homogéneasse utilizan bases que cuya composición es de más del 50% de azúcar; no es para menos, nuestras bebidas se tienen que ver tan apetitosas como en las fotos y esto no se logra sin estabilizantes.
Si a esta bomba de azúcar le sumamos la crema batida y los toppings que las coronan, la cosa se pone peor.
Si eres fan de estas bebidas recuerda que beberlas lo menos posible es lo ideal, una diaria sin duda dañará tu salud.
Hace mucho tiempo las malteadas tenían dos ingredientes: leche y helado. A medida que pasó el tiempo, los restaurantes comenzaron a llenar sus malteadas con todo, desde caramelos hasta químicos ¡transformándolos en mezclas potencialmente peligrosas de más de mil calorías!
De hecho, algunos de los batidos de restaurante de menor calibre aún tienen más de 800 calorías, ¡en el tamaño pequeño!
Si no te puedes contener las ganas hazlo a la antigua, mezcla leche con helado y listo, tendrás una malteada con menos calorías y azúcar.
Las alternativas a la leche azucarada no solo contienen aditivos como la carragenina que irrita el estómago, sino que suelen ser bajas en proteínas y ser una fuente concentrada de azúcar.
Una porción de 250 mililitros puede tener tanta azúcar como media lata de refresco. La leche de vaca, por otro lado, obtiene toda su dulzura de la lactosa natural, un azúcar presente en la leche.
¿Eres intolerante a la lactosa? Perfecto, solo revisa muy bien la etiqueta o prepara tu lechada tú mismo.
Al igual que el jugo de tomate, los Bloody Mary a menudo están llenos de sodio y azúcar, teniendo más de mil miligramos del primero en un vaso grande.
Debido a que los síntomas de la resaca a menudo se amplifican cuando estamos deshidratado, el consumo de una bebida con mucho sodio no nos hará un gran favor, elimínalas del brunch.
Las calorías del tequila que de por sí es un destilado a partir de la descomposición de azúcar son de alrededor de 150 por onza. Sumado está el refresco y el jarabe que le ponen al licuarlos para estabilizar.
Definitivamente te conviene preparar una margarita en casa antes de pedirla en un bar o restaurante.