Si el nopal es de los ingredientes mexicanos más nutritivos, consumir sus frutos es equilibrar la dieta de una manera más dulce y tradicional en nuestro país.
Existen más de 30 especies catalogadas de cactus y cada una da productos diferentes según las características de la planta y el suelo.
Aquí te contamos cuáles son los seis tipos de tunas más consumidos en el mundo, sus propiedades, temporadas y usos.
Esta es, quizá, la tuna más famosa en México. Se da prácticamente en todo el centro y norte del país y proviene de las nopaleras maduras en la temporada de abril a octubre.
Su alto contenido de agua ayuda a prevenir la deshidratación (un remedio para la cruda muy natural) y regula los niveles de azúcar en la sangre.
Comúnmente se emplea para hacer agua, aunque también es muy rica y fresca para comerla sola o con limón y chile piquín.
Esta tuna es un pariente muy cercano de la blanca, pero esta nopalera es otra variedad que produce más betalaínas, un pigmento antioxidante que da el color morado intenso al fruto. También hay unas color anaranjado y de sabor menos intenso.
Es de forma ovoide,aunque hay una variedad completamente esférica que en algunos lugares del centro del país conocen como pitaya.
Esta variedad tiene más concentración de azúcar, por lo que será más dulce que la tuna blanca. De igual manera, estas tunas ayudan a regular el sistema cardiaco, por lo que son preventivas para enfermedades del corazón.
Por lo brillante de su pulpa, es muy buena para decorar platos y hacer reducciones. Actualmente, el mundo de la coctelería la utiliza para mezclar con tequila o mezcal. También se puede comer sola con chile y limón.
Esta tuna está disponible todo el año y es uno de los ingredientes más socorridos para la elaboración del famoso mole de olla.
En Guanajuato es muy común para la elaboración de mermeladas y salsas, y el municipio de Pénjamo es conocido por su rico caldo de xoconostle.
Esta es una variedad ácidaen comparación con el resto de las frutas de cactáceas populares. Su color es blanco en el contorno y rojo en el corazón, donde están todas las semillas concentradas.
El nivel de acidez del xoconostle es tan alto que se dice que en épocas prehispánicas se utilizaba como conservador de alimentos. Hoy en día se utiliza para dar acidez y equilibrio a salsas y guisos salados.
Según la región será nombrada de diferentes formas, pero la fruta es prácticamente la misma. Esta es una de las especies más bonitas por la cáscara en tonos rojos y amarillos y una pulpa blanca o roja.
El sabor es muy dulce y sus semillas pequeñas. Generalmente se consume sola, aunque la puedes incluir en algún licuado matutino para dar un toque dulce.
Un dato curioso de esta fruta es que llegó al sudeste asiático por medio de la Nao de China, la ruta comercial que conectaba las colonias españolas de Filipinas y lo que hoy es México.
Por este motivo, la mayoría de las personas la relacionan con los frutos del otro continente aunque su origen es mesoamericano.
Es alta en Vitamina C, Calcio, hierro y fósforo. El 80% de su composición es agua y azúcares simples, por lo que es una bomba nutricional muy eficiente.
Esta es una de las pocas tunas que no son comunes en México. Se da en las zonas áridas de Chile; es de forma completamente redonda y su color es verde intenso.
Es muy alta en potasio y Vitamina C y tiene altos porcentajes de agua y azúcares, por lo que da sensación de saciedad, hidrata y es de fácil digestión.
Lo vas a encontrar en mermeladas, jaleas o en jugo.
La más pequeña de las frutas del nopal. El garambullo es protagonista en la cocina del Bajío y su temporada es de abril a junio.
Es complicada de conseguir pues el cultivo es silvestre y el consumo estacional; si la encuentras, no lo dudes y pruébala.
Es de sabor dulce y ácido, muy popular para hacer aguas frescas y nieves. También se puede consumir sola o preparar jaleas con él.
Es alto en antioxidantes, vitamina C y fibra insoluble, así que también funciona si quieres incluirlo en la dieta para cuidar tu peso.