Hay que empezar por aclarar una cosa: el único árbol que nos da cualquier té es uno, la camelia sinensis. Las bebidas que se derivan de otros árboles, plantas, hierbas o flores se llaman tisanas o infusiones.
De la camelia sinensis se extraen cuatro tipos de té -el blanco, el verde, el oolong o azul y el negro-, ¡sí, es la misma para todos! La diferencia radica en el procesamiento de la planta y su grado de oxidación.
La historia de cómo se descubrió tiene hasta tres versiones e involucra a los principales productores de té en el mundo, China, Japón y la India. En cualquiera de las tres historias podemos destacar que fue una coincidencia, ya sea por comer la planta o beberla.
El delicado té blanco
El té blanco tiene un método de procesamiento distinto a los demás. La planta se debe cortar en sus brotes, las yemas y hojas jóvenes. Esto se refiere a la parte de hasta arriba de la planta y a lo mucho las dos hojitas que siguen después del brote. Posterior a ello se deja marchitar ligeramente, secar al sol y luego se procesa muy poco para prevenir la oxidación.
Un té blanco de calidad se distingue por las vellosidades que aún se aprecian en sus brotes y el color plateado de las yemas, de ahí que también le llamen Silver Needle.
De los cuatro tés derivados de la camelia sinensis, el blanco es el que contiene la menor cantidad de cafeína -o teína– por el débil proceso de oxidación al que se somete.
Al tener un procesamiento tan delicado para cuidar que no se transforme en ningún otro té-, el blanco conserva más propiedades que naturalmente tiene la camelia sinensis.
Para preparar una taza de té blanco correctamente, el agua no debe rebasar los 80 grados centígrados ni lo debes dejar infusionar por más de siete minutos.
Beneficios a la salud
El té blanco, también llamado té de la belleza, es un importante aliado natural por ser un depurador y desintoxicante. Su alta concentración de antioxidantes ayuda a “atrapar” los radicales libres del organismo, lo que protege la piel y previene el envejecimiento prematuro.
Su concentración natural de floruro también sirve para proteger los dientes por ser uno de los encargados del proceso de eliminación de bacterias, que son las causantes de acidificar la saliva y causar caries.
El té blanco y sus propiedades antibacterianas y antivirales también ayudan a fortalecer el sistema inmunológico, por lo que es un excelente aliado en enfermedades como gripas o resfriados.
El precio de este té varía según la casa de té, pero va de $400 a $800 pesos los 100 gramos, cantidad que alcanza para unas 40 tazas.
Para tomar una buena taza de té blanco en la ciudad de México, estos lugares (que, además, cuentan con tienda en línea):
Zoma Tea Collection
Fb: @ZomaTeaCollection
Té Cuento
Fb: @TeCuentoCasadeTe
Shaktea
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