Los alimentos ultraprocesados –esos que están elaborados en fábricas con ingredientes desconocidos para nuestro lenguaje cotidiano- podrían estar relacionados al cáncer, de acuerdo con un estudio publicado recientemente en The British Medical Journal.

Esos alimentos son aquellos que contienen una larga lista de aditivos, preservativos, saborizantes y colorantes, y por lo general grandes cantidades de azúcar, grasa y sal.

Un equipo de investigadores con base en la Sorbona de París analizó los datos y hábitos alimenticios de 105 mil adultos parte de un estudio del French NutriNet-Santé, el cual registró el consumo de unos 3 mil 300 productos alimenticios.

Los investigadores encontraron que un aumento de 10% en el consumo de alimentos ultraprocesados en la dieta se relacionó con el incremento de 12% en algunos tipos de cáncer.

“Si esto se confirma en otras poblaciones, estos resultados sugerirían que el rápido incremento del consumo de alimentos ultraprocesados podría llevar a un aumento en los casos de cáncer en las próximas décadas”, se lee en el British Medical Journal.

Este tipo de alimentos ya han sido asociados con la obesidad, sin embargo, la relación con el cáncer es nueva, dice Mathilde Touvier, una de las autoras del estudio. “Es el primer estudio, no hay que ser alarmistas. Estos resultados necesitan confirmarse en otros estudios” y revisar si el incremento en el riesgo de cáncer se debe a los altos niveles de azúcar, grasa, sal o aditivos, es decir, falta encontrar qué es lo que realmente lo provoca.

¿Qué es un alimento superprocesado?

La definición fue creada por un grupo de científicos liderado por el profesor Carlos Monteiro en Brasil, un país que ya urge a sus ciudadanos a consumir este tipo de alimentos lo menos posible.

El sistema de clasificación, denominado Nova, divide a la comida en cuatro grupos:

• Crudos o mínimamente procesados, como las semillas, los huevos, las frutas y la leche.
• Ingredientes culinarios procesados, como los aceites y la mantequilla.
• Alimentos procesados, como los vegetales enlatados, pescados en conservas y quesos.
• Alimentos ultraprocesados, que son productos elaborados con sustancias derivadas de alimentos y aditivos. ¿Ejemplos? Los refrescos, las galletas, los dulces, salchichas, sopas instantáneas, comidas que ya vienen preparadas, etcétera.

Si quieres disminuir tu consumo de alimentos ultraprocesados…

Una de las nutriólogas del sitio Consumer Report, Amy Keating, recomienda:

• Comenzar lentamente: no retires todos estos alimentos de tu dieta al mismo tiempo. Establece metas que sean realizables, como quitarte dos o tres productos ultraprocesados a la semana, por ejemplo, y aumentar tu consumo de alimentos frescos.
• Hazlo tú mismo: varios alimentos como aderezos, granola o sopas pueden hacerse en casa, lo que te dará un control total de los ingredientes.
• Planea tus snacks: ten cerca de ti nueces, almendras, frutas, zanahorias, jícamas o pepinos cerca de ti para que no caigas en la tentación de abrir una bolsa de papitas.
• Haz pequeños cambios saludables: en lugar de esa bolsa de papitas, mejor haz palomitas en casa; cambia los cereales de caja por avena y fruta; y prefiere el yogurt natural a los llenos de azúcar y frutas.