En tu alacena tienes uno de los ingredientes griegos más importantes (y antiguos) del mundo: el aceite de oliva, una de las bases de la cocina mediterránea. Así es, los griegos han cultivado el olivo desde hace milenios.
Además del aceite de oliva, Grecia nos dio el orégano, la miel y el tzatziki, el famoso aderezo de yogurt, pepino y ajo, entre otros platos e ingredientes maravillosos que aún no descubrimos de este lado del mundo.
Para que comiences a entrarle a la cocina griega, estos diez platos básicos:
Cualquier comida griega debe ser antecedida o acompañada de unas buenas aceitunas, ya sea curadas en salmuera o al natural.
La dieta mediterránea es deliciosamente saludable y el ejemplo perfecto es este plato, el cual consiste simplemente en verduras asadas. Generalmente lleva berenjena –muy popular en la cocina griega-, papa, cebolla, zanahorias y pimientos.
Son hojas de parra rellenas de arroz y carne.
Es conocida también como “ensalada griega”, la preferida en todo el país. Lleva jitomate, pepino, aceite de oliva –obviamente-, orégano y sal. Se puede robustecer con queso feta, aceitunas, cebollas y pimiento verde. A veces se le añaden alcaparras, vinagre y perejil.
Es EL queso de Grecia. Se elabora con la cuajada de leche de oveja y leche de vaca, la cual se cura con salmuera. Este queso tiene denominación de origen, es decir, solo puede llamarse de esta manera si fue producido en este país. Lo ves en todos lados, desde ensaladas y gyros, hasta postres.
Es carne de pollo, cerdo, cordero o res cocinada en un trompo –como el de nuestros adorados taquitos al pastor- y colocada en un pan pita con papas, jitomates, cebolla, perejil y aderezos como el tzatziki.
El pan pita es un pan de harina de trigo blanco que se cocina a alta temperatura en paredes de hornos de ladrillo y que está ligeramente fermentado.
Las encuentras en forma de empanadas o de bolas ligeramente fritas, y la consistencia interior es de puré. Generalmente se condimentan con eneldo, menta u otras maravillas secretas. Si las comes con un poquito de tzatziki llegas al cielo.
Este es uno de los platos más exquisitos y golosos de la cocina griega. El secreto son las capas de ingredientes: berenjena salteada, carne de cordero picada, puré de tomate, cebolla, ajo, especias como canela, papa y una capa final de queso derretido y salsa bechamel.
En Grecia adoran los postres con aceite de oliva y miel. Las baklavas se hacen con capas de pasta filo, miel y nueces, un postre sencillamente irresistible.
Es el licor griego más tradicional. Está elaborado con uvas, anís y azúcar. Es común tomarlo como aperitivo o digestivo, frío, con hielo o rebajado con un poquito de agua.