Cada año, el Basque Culinary Center entrega un premio a un cocinero o cocinera que aproveche la gastronomía para salir de su cocina y generar un impacto en la sociedad. En esta ocasión, Xochimilco, la zona lacustre de la ciudad de México, llena de historia e importancia para la cocina de nuestro país, será el escenario donde los jueces decidirán el ganador y, además, discutirán sobre la biodiversidad.
Del 16 al 18 de julio, eminencias de la gastronomía como Ferran Adrià (España), Heston Blumenthal (Inglaterra), Massimo Bottura (Italia), René Redzepi (Dinamarca) y Enrique Olvera (México) compartirán experiencias y visiones para contribuir con el sector gastronómico desde un enfoque cultural y social. Será precisamente Olvera quien abra la discusión sobre temas de biodiversidad y desafíos para cuidar el planeta y el medio ambiente.
Este tema, dice el chef de Pujol, “nos interpela, en México, de forma muy cercana, no solo por la riqueza que caracteriza nuestra basta despensa, sino por los desafíos que plantea cuidarla o defenderla, entendiendo que la biodiversidad es un concepto que no solo se liga a semillas o especies, sino a realidades que son también culturales e interpersonales”.
La mesa redonda será en Xochimilco y expertos del más alto nivel se juntarán para compartir experiencias, visiones y testimonios que contribuyan con el sector gastronómico desde un enfoque interdisciplinario.
El Basque Culinary World Prize, a diferencia de otros premios enfocados en las habilidades culinarias, reconoce a chefs con ideas innovadoras y creativas que generen un impacto positivo en la industria alimentaria.
Chefs, escritores, periodistas, entre otros profesionales del medio gastronómico, son los encargados de nominar a los candidatos, sin importar su nacionalidad o cultura culinaria. La nominaciones se llevan a cabo a través de la plataforma del Basque Culinary Center, la cual acepta propuestas hasta el 2 de mayo. Finalmente, los miembros del Consejo Internacional del BCC y expertos internacionales serán los encargados de anunciar a la cocinera o el cocinero triunfante, quien gana 100 mil euros.
“La cocina no es un fin en sí mismo, sino un medio para cosas mucho más importantes. Asumida así, ha probado ser una herramienta poderosa de cambio. Por eso los cocineros deben estar comprometidos y conscientes de su contribución a una sociedad más justa, solidaria y sostenible”, dice Gastón Acurio, chef de Astrid & Gastón en Perú.
El año pasado, la chef venezolana Maria Fernanda Di Giacobbe fue elegida como la ganadora del Basque Culinary World Prize por sus proyectos Kakao y Cacao de Origen. A través de ellos, Di Giacobbe ha logrado crear una red de educación, emprendimiento y desarrollo en comunidades productoras de cacao criollo en Venezuela que ha beneficiado a cientos de personas.