El incremento a los precios de la gasolina, que entró en vigor a partir de este 1 de enero, afectará también los precios de los alimentos, en particular a los productos de la canasta básica.
Alrededor de 100 artículos, productos y servicios forman parte de la canasta básica mexicana, entre ellos abarrotes como el atún en aceite, el Gerber, café soluble, harina de maíz, gelatina, huevo, leche, pan, sal y tortillas; carne de pollo, de cerdo y de res; avena, Corn Flakes naturales; aguacate, guayaba, jícama y otras frutas; acelga, cebolla, espinaca, lechuga romana, jitomate, nopal y otras verduras; arroz, frijol negro, garbanzo, haba y lenteja; pescados como mojarra y sierra; chorizo, crema, mantequilla, queso Oaxaca y panela, yogurt y otros productos de salchichonería y lácteos.
Al aumentar la gasolina se afectan los precios de toda la cadena productiva, explica el presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur), Enrique Solana Sentíes, lo que representará “un duro golpe para el bolsillo de las familias mexicanas” porque “el impacto será en el precio final” de los productos. Esto recae directamente en los consumidores, quienes verán reducida su capacidad para comprarlos.
Hasta el momento se han anunciado aumentos en la leche y el arroz. El Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche señaló que los aumentos en los productos lácteos podrían ser entre 8 y 10%, es decir, de 40 a 60 centavos por litro. Además, el Consejo Nacional de Productores de Arroz de México estima que los costos del producto podrían elevarse entre 25 y 30%.
De acuerdo con un reporte del Centro de Análisis Multidisciplinario de la Facultad de Economía de la UNAM, en los últimos 30 años el precio de la canasta básica subió 5,800%. Hoy, una canasta básica cuesta 58 veces más de lo que costaba en 1987.
El costo de la canasta básica en 2016 fue de 2,769.05 pesos, según el Índice Nacional de Precios al Consumidor.
Animal Político reporta que desde 1987 el ingreso de las familias ha aumentado, según el salario mínimo, hasta 1,129%. Sin embargo, debido a la inflación o el incremento de precios de los bienes de consumo, el poder adquisitivo ha ido a la baja, por lo tanto, el aumento salarial no se ha reflejado en que los mexicanos puedan comprar más cosas con el sueldo que ganan.
De acuerdo con el Centro de Análisis Multidisciplinario de la Facultad de Economía de la UNAM, en 2016 el precio de la canasta básica recomendada por día para una familia fue de 218 pesos, mientras que el salario mínimo diario solo fue de 73.04 pesos. Esto quiere decir que un trabajador que ganó el mínimo diario solo pudo comprar 33% de la canasta básica.
De acuerdo con este estudio de la UNAM, se necesitan tres salarios mínimos para adquirir la Canasta Alimenticia Recomendable, es decir, un aumento del 200% para que el salario mínimo alcance para comer y cubrir las necesidades básicas.
Además, para alcanzar el poder adquisitivo de 1987 se requeriría que el salario mínimo fuera de cinco veces lo que es ahora, es decir, un aumento de 400% o 40 veces el aumento que se aprobó para este 2017, que fue de 7 pesos. En 2016, el salario mínimo fue de 73.04 pesos y en 2017 será de 80.04 pesos.
En 30 años, productos como el frijol, la tortilla, el pan y el huevo han aumentado más de 30 veces. Según Animal Político, los precios de estos productos se han incrementado de esta manera:
El frijol: su precio se ha elevado 45 veces. En 1987 se compraban 11 kilos con el salario mínimo; el año pasado solo alcanzó para dos kilos.
La tortilla: ahora cuesta 8,814% más que en 1987. En ese año se podían comprar 54 kilos de tortillas con el salario mínimo; en 2016 solo se pudo comprar 6 kilos.
El pan: hoy cuesta 63 veces más. En 1987 se podían comprar 215 bolillos con el salario mínimo; en 2016 solo alcanzó para 46.
Huevo: en 1987 se podían comprar 9 kilos de huevo con el salario mínimo y el año pasado solo 3 kilos. El precio aumentó 34 veces.
Te compartimos un comparativo de precios de la canasta básica de alimentos de 2015 y 2016, con datos del Índice Nacional de Precios al Consumidor.
*Fuente: Índice Nacional de Precios al Consumidor.